Un tribunal de las afueras de Buenos Aires condenó hoy a prisión perpetua a un hombre que mató y sepultó a su esposa debajo de la cama matrimonial en 1998, crimen que se descubrió hace dos años al ser denunciado por uno de sus hijos.
Mario Freiro fue condenado por "homicidio calificado por el vínculo" de María Angela De Luca, según una sentencia en la que los jueces calificaron al crimen de "macabro" y "espeluznante".
Una vez leída la sentencia del Tribunal Oral en lo Criminal del distrito de La Matanza, a 20 kilómetros de la capital argentina, los familiares de la mujer muerta expresaron su satisfacción mientras que la segunda esposa de Freiro declaraba a los periodistas que lo había perdonado por el crimen.
El tribunal consideró como "agravante" que Freiro haya sepultado los restos de su esposa debajo de la cama matrimonial, donde fue hallado en 2005, cuando el hijo menor de la pareja lo denunció a la policía.
Durante la instrucción de la causa, el reo había admitido que para defenderse de una agresión, estranguló a su esposa, que le era infiel, y sepultó su cadáver al defenderse de una agresión, pero durante los alegatos del juicio oral sostuvo que no recordaba nada de lo sucedido.
Los tres miembros del tribunal reconocieron en su dictamen que María Angela De Luca era infiel y agredió a su marido con una sartén con aceite caliente antes de ser asesinato, pero rechazaron el planteo de la defensa de atenuar la condena de Freiro por emoción violenta.
María Campos, actual pareja de Freiro, acudió hoy a la lectura del fallo del tribunal con una camiseta con la leyenda "Mario estamos con vos" y sostuvo que perdonó al hombre "porque estaría cansado de lo que le hacía" De Luca.
"Todo el barrio habla mal de ella y está a favor de él, por algo será", comentó la mujer a los periodistas.
