INVITADO | JUAN MANUEL ROSALES ESTARÁ COMO SOLISTA EN LA FLAUTA.
EL SIGLO DE TORREÓN
Tatul Yeghiazarián llevará por primera vez la batuta de la Camerata de Coahuila esta noche.
TORREÓN, COAH.- Una competencia entre instrumentos, solistas y la orquesta es lo que se vivirá esta noche, como parte del tercer concierto de la Temporada 2007 de la Camerata de Coahuila.
Entre música que irá de suave a enérgica, de barroca a romántica, de virtuosos pasajes a brillantes fugas, la orquesta ofrecerá esta presentación a las 8:30 de la noche, como siempre en el Teatro Nazas, sede de la orquesta lagunera.
La flauta será el instrumento clave en este concierto, pero destaca la selección del programa que durante la primera parte presentará obras del Barroco con Vivaldi y Telemann, y en la segunda ofrecerá algo del periodo Romántico en su forma más pura con Mendelssohn.
La dirección en esta ocasión no estará a cargo del maestro Ramón Shade sino del concertino de la Camerata, el violinista Tatul Yeghiazarián, quien después de tocar durante ocho años con la orquesta por primera vez asumirá la batuta de la misma.
?Quiero agradecer al maestro Shade por esta oportunidad, he estado ocho años trabajando con la Camerata y aunque ya había dirigido algunos conciertos didácticos, ésta es la primera vez que dirijo un concierto de Temporada?.
La noche iniciará con la música de Vivaldi: ?Tocaremos el Concerto Grosso en Re Menor, en el cual dos violines y el cello competirán con la orquesta. Son tres movimientos, el tercero es muy enérgico y es ahí en donde se demostrarán las posibilidades de los instrumentos?.
Después seguirá la Suite para Flauta en La Menor de Telemann, prueba de fuego para el solista de la noche, Juan Manuel Rosales, quien tendrá que demostrar el virtuosismo que requiere esta obra.
?Hay un paralelo con la Suite de Bach, es una serie de danzas. Se trata de una obra muy clásica que tiene bastante grado de dificultad y que todo flautista considera un reto, aunque tomando en cuenta la época en la que fue escrita debe haber sido más difícil entonces, porque en ese tiempo se tocaba la flauta dulce. Tiene partes muy virtuosas, muy solísticas?, explica Rosales.
Añade que una de las características de esta primera parte del concierto es que no se utilizará toda la orquesta por tratarse de música del Barroco: ?No usaremos todas la cuerdas sino la mitad y en esta obra tratamos de restituir lo que era el Barroco, que fue creado para salas pequeñas, contrario a lo que es el Romántico, en el que hay más instrumentos porque era para salas más grandes?.
Por su parte, Yeghiazarián agrega que ?aquí en la Suite también habrá competencia entre el violín y la flauta y retomaremos el Barroco, cuando se podía improvisar más, en este periodo no sólo había compositores sino también intérpretes?.
Finalmente la Camerata tocará la Sinfonía No.1 en Do Menor de Mendelssohn, para lo cual originalmente se requirió una orquestación basada en pares de flautas, oboes, clarinetes, cornos, trompetas, timbales y una selección de cuerdas: ?Esta obra la compuso Mendelssohn cuando tenía tan sólo 15 años y es impresionante imaginar cómo alguien tan joven pudo escribir algo tan maduro?, dice Yeghiazarián.
Explica el concertino que ?es una sinfonía muy clásica, pero que tiene también elementos románticos?.