Sin avances, investigación sobre mujer decapitada
GÓMEZ PALACIO, DGO.- A un mes de la desaparición de Rocío Arcaute García, que fuera encontrada decapitada, no hay líneas claras de investigación ni avances que ayuden a esclarecer su asesinato. No obstante, ya se asignó a un grupo de agentes de la Dirección Estatal de Investigaciones (DEI) para que trabajen en el caso aunque aún no se han rendido informes.
Aurelio Urbina Suárez, por lo pronto único agente del Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Salud Personal, señaló que, lamentablemente, alrededor del caso han surgido muchos rumores pero han sido pocas las personas que han acudido a declarar.
Actualmente se investigan las posibles relaciones que tuvo esta mujer. “Pudo ser alguien conocido de ella, también pudo estar sedada en el momento en el que le cortaron la cabeza porque aunque ésta fue la causa de la muerte, no encontramos huellas de forcejeos, se nos dificulta investigar esto porque el cuerpo cuando fue encontrado ya no tenía fluidos”, dijo Urbina.
Fue el 2 de mayo de 2007 cuando los familiares de Rocío acudieron a la Subprocuraduría de Justicia del Estado para denunciar la desaparición de esta mujer de 28 años de edad, siendo el viernes 27 de abril la última vez que la vieron. El 4 de mayo las empleadas de un motel ubicado en la colonia Villa Jardín reportaron que en avenida Jacintos entre Orquídeas y Pensamientos estaba un cadáver, era el de Rocío.
El cuerpo fue encontrado sin cabeza, desnudo y escondido entre los matorrales. Su cuerpo había sido introducido en dos bolsas negras, la primera le cubría de los hombros a la cintura y la segunda de la cintura hacía abajo.
Las dos personas sujetas a investigación por este crimen, su esposo y su pareja sentimental, que habían sido detenidas, quedaron libres bajo las reservas de la Ley al vencer término constitucional que tiene el Ministerio Público para definir la situación legal de una persona. La cabeza de la víctima no se recuperó.
No hay detenidos
El ocho de mayo la Subprocuraduría de Justicia del Estado puso en libertad con las reservas de Ley a Roberto de la Rosa Mendoza, quien estuvo sujeto a investigación por el homicidio de Rocío, ya que sostenía una relación sentimental con la hoy occisa.
De la Rosa Mendoza recuperó su libertad cuando se venció el término constitucional de 48 horas que tiene el Ministerio Público para definir la situación legal de una persona.
El nueve de mayo tras vencerse el término constitucional para mantenerlo en calidad de detenido y ante la
negativa a la solicitud de arraigo, la Subprocuraduría General de Justicia del Estado en la Región Lagunera de Durango, dejó en libertad bajo las reservas de la Ley a Esteban Soto Camarena, esposo de Rocío
Arcaute.
