Residentes de Gizo en la Provincia Occidental de las Islas Salomón observan cómo fue arrastrada una lancha hasta el centro de la ciudad luego que el lunes un tsunami castigara la zona. (AP)
Comienza a llegar la ayuda lentamente a las zonas afectadas.
Agencias
Sydney, Australia.- Entre los escombros de localidades arrasadas por el tsunami de la víspera en la costa occidental de las Islas Salomón había sobrevivientes que hurgaban ayer en busca de comida y agua. Las autoridades dijeron que miles de personas quedaron sin hogar y al menos 28 personas murieron, aunque todavía intentan llegar a comunidades remotas.
Las primeras imágenes de televisión sobre la zona devastada fueron tomadas desde helicópteros luego del doble desastre del lunes, un terremoto seguido minutos después por un elevado muro de agua. Las escenas mostraban esfuerzos de construcción entre las derruidas casas de lámina que estaban en el litoral colmado de lodo.
Había también hombres, algunos con el torso desnudo y pantalones cortos, que hurgaban entre los escombros. Algunos edificios se inclinaban riesgosamente sobre zancos rotos.
La Oficina de Gestión de Desastres Nacionales confirmó que en las provincias del Oeste y de Choiseul se han registrado 28 víctimas mortales, 5,409 desplazados y 916 edificios destruidos, y señaló que esas cifras continuarán elevándose.
Aviones del Gobierno de las Salomón y de la Misión de Asistencia Regional, la fuerza regional desplegada para restablecer la paz en el país, agitado por enfrentamientos políticos, comenzaron a volar sobre el área afectada para valorar los daños y las prioridades de asistencia.
Además, Australia ya ha ofrecido una ayuda inicial de millón y medio de dólares para operaciones de emergencia y reconstrucción.
Sin embargo, el primer ministro de Salomón, Manasseh Sogavare, dijo que su Gobierno tiene que esperar a conocer el alcance exacto de la tragedia antes de decidir qué acciones son prioritarias para asistir a las víctimas, informó la radio local “Solomon Islands Broadcasting Corporation”.
Y es que muchas localidades continúan incomunicadas y otras han sido abandonadas por sus habitantes, que se han refugiado en las montañas ante el temor a que se produzcan nuevas olas gigantes y réplicas del terremoto de 8.1 grados de magnitud que el lunes sacudió el archipiélago.
Este es el caso de la isla de Simbo, donde en algunos pueblos han quedado pocas casas en pie, lo que se ha agravado por el hecho de que la Cruz Roja se ha quedado sin suministros para alimentar a los desplazados.
En esa isla, 31 kilómetros al suroeste de Gizo y con la que no se ha podido contactar, la Iglesia Unida informó que un obispo de la congregación y tres fieles murieron dentro de un templo en el que se celebraba una ordenación.
También se ha conocido que a la provincia más afectada por el terremoto y la devastadora acción del agua, la del Oeste, cuya capital es Gizo, no llegó ninguna alerta de “tsunami”
“No hubo ninguna alerta (de tsunami), la alerta fueron los temblores de la tierra (...) Nos sacudió con fuerza, con mucha fuerza, estábamos asustados y de repente el mar se levantó”, explicó a la radio neozelandesa el gobernador de la provincia, Alex Lokopio.
A pesar que las informaciones iniciales aseguraron que el único punto del Pacífico Sur donde el maremoto causó víctimas fue en el oeste de las Salomón, la radio “ABC” indicó ayer que cinco personas, todas de una misma familia, desaparecieron en la vecina Papúa Nueva Guinea.
Una ola de tres metros, informó la citada emisora, golpeó una pequeña isla en Milne Bay, en la provincia papuana de Bougainville, antes que se emitiera la alerta de “tsunami” en ese país.
El ministro papuano de Asuntos de Bougainville, Peter Barter, dijo no tener confirmación de esas muertes, aunque admitió que el aislamiento de algunas zonas dificulta la composición de los hechos.
Así las cosas, se mantiene el riesgo de actividad sísmica en las Salomón, después que ayer se registraran en el área dos fuertes réplicas y otras menores por la tarde, de acuerdo con la Oficina de Gestión de Desastres Nacionales.
El terremoto más fuerte de la jornada, de 6.2 grados, ocurrió a las 10:20 hora local y a 305 kilómetros al noroeste de Honiara, capital de las Salomón, indicó el Servicio de Geología de Estados Unidos.
Las Islas Salomón, con unos 500 mil habitantes, están situadas en el llamado “Anillo de Fuego” del Pacífico, donde se encuentran varias plataformas continentales y es frecuente la actividad sísmica y volcánica.