Tres volcaduras se registraron durante la madrugada de ayer en diferentes puntos de la entidad.
Ezequiel, un niño de ocho años, casi dormido pues eran las 3:00 de la mañana, viajaba en un vehículo Chevrolet, manejaba su padre y en el asiento contiguo iba su madre, de pronto sólo sintió que se salieron de la carretera y todo empezó a dar vueltas, cuando caviló vio cómo su padre casi inconsciente se quejaba y se tocaba el pecho y cómo su madre moría por los golpes que sufrió en la volcadura.
La madrugada de ayer en la carretera a Parral a toda velocidad viajaban a bordo de un vehículo Chevrolet, de color blanco, José Santos Nájera, de 33 años; su esposa Natalia Carrillo Ramírez, de 31; y su menor hijo Ezequiel, de ocho, de pronto se salieron de la carretera y se suscitó la volcadura, quedando sin vida en el lugar de los hechos la mujer, mientras que el hombre sufrió fractura de tórax y el menor salió ileso.
El accidente se registró en el kilómetro 47 de la citada rúa en el tramo carretero Durango-La Granja y los accidentados, vecinos del poblado 18 de Agosto, del municipio de Poanas, fueron atendidos en primera instancia por los paramédicos de Protección Civil Municipal, para posteriormente ser trasladados al Hospital General.
DIO VARIAS VOLTERETAS;
SE ENCUENTRA GRAVE
Por otra parte la Procuraduría General de Justicia del Estado informó sobre la volcadura que se registró en la carretera Durango-Parral, a la altura del kilómetro 100, donde Juan Manuel García Ontiveros, vecino de San Lucas de Ocampo, perteneciente a San Juan del Río, sufrió traumatismo severo de cráneo, así como golpes y excoriaciones en varias partes del cuerpo.
El siniestro se suscitó debido al exceso de velocidad con que circulaba, según el reporte de los agentes de la Procuraduría, quines señalaron que el mencionado se encuentra recibiendo atención médica en el Hospital General de esta ciudad.
Quedaron prensados entre la carrocería del auto
A la 1:30 de la mañana de ayer los elementos de la Dirección Municipal de Protección Civil se trasladaron a la carretera a Torreón, a la altura del puente Morteros, donde se suscitó la volcadura de un vehículo Pontiac, de la línea Grand Prix, quedando sus pasajeros prensados entre los fierros retorcidos del auto.
El conductor del vehículo, de nombre Ramiro Martínez, de 18 años, tuvo que ser liberado por el escuadrón de rescate de Protección Civil, al igual que su compañero Eduardo, de quien se desconocen sus apellidos, pues debido a las lesiones de gravedad que sufrieron no pudieron aportar más datos, siendo trasladados de urgencia al Hospital General para su asistencia médica.