El aparato pesa más de cinco kilos, tiene un objetivo de latón y es la cámara más cara del mundo, ya que su precio alcanzó los 588 mil 613 euros.
Una de las primeras cámaras de fotografía fabricadas comercialmente, si no la más antigua, se subastó en la Galería Westlicht de Viena por 588 mil 613 euros, con lo cual se convirtió en la cámara de fotos más cara del mundo y la historia.
Se trata de una pieza fabricada en 1839 por la firma parisiense Susse Fréres según el modelo daguerrotipo auténtico, precursor de la fotografía moderna, y se puso a subasta con un precio de partida de 100 mil euros.
Según informó la citada Galería, el máximo postor ofreció -a través de la red de internet- 480 mil 500 euros por el preciado aparato, que pesa más de cinco kilos y tiene un objetivo de latón, pero el precio real de venta se elevó a 588 mil 613 euros con la tasa de subasta del 22.5 por ciento.
El precio máximo al que se había vendido hasta ahora una cámara de fotografía era de unos 200 mil euros.
El objeto de madera que encontró un día en su buhardilla el profesor Wolfgang Haase entre diversas cosas heredadas resultó ser, según los expertos, anterior a la producción del daguerrotipo de Giroux -el cuñado de Louis Daguerre-, considerada ésta como el nacimiento de la fotografía comercial y de la cual se han salvado unos diez ejemplares que están en diversos museos.