Sueñan con un espacio mejor en el Bosque
TORREÓN, COAH.- Durante varias décadas el Bosque Venustiano Carranza fue el paseo público favorito de los torreonenses, pero en la actualidad el principal pulmón de la ciudad es el centro de entrenamiento deportivo más importante de toda la Comarca Lagunera.
Aún antes del amanecer decenas de personas ya realizan alguna actividad física en el bosque, desde atletas de alto rendimiento hasta personas que sólo acuden en busca de ejercitarse y estar lejos de los problemas que provoca la vida sedentaria, característica del siglo XXI. Para la mayoría de los asistentes a este espacio, se requieren mejoras y demandan la intervención de la autoridad.
UNA PISTA MÁS ANCHA
Miguel Reséndiz Duarte acude seis días por semana al Bosque Venustiano Carranza, se trata de uno de los atletas laguneros que ha participado en cada una de las 19 ediciones del Maratón Internacional de La Laguna y manifiesta sus puntos de vista sobre las instalaciones: “es muy necesario tener una pista más amplia, continua y de arcilla o de tartán, porque favorecería bastante las condiciones de nuestro entrenamiento”.
Al término de su actividad, Miguel comentó al respecto: “aquí entrenamos diariamente muchos corredores del Maratón y tener una pista adecuada es de suma importancia, el Bosque es el único pulmón de la ciudad y por esa razón venimos diariamente, aquí encontramos las condiciones de seguridad apropiadas porque no hay tráfico vehicular”.
Al reconocer que los corredores no tienen otra opción para su entrenamiento, Miguel agrega: “además de una pista apropiada se necesita infraestructura tipo gimnasio, que no sea sofisticada, pero sí con lo necesario para que cada persona pueda complementar su entrenamiento”. Se manifestó a favor de un cobro mínimo para acceder a las instalaciones: “estaría de acuerdo siempre y cuando esos recursos realmente se canalizaran para mejorar el Bosque, junto con el Municipio y Gobierno del Estado”.
Al referirse más a las condiciones de la pista, Reséndiz Duarte dijo: “mucha gente escupe y ese es un problema grave, como corredor entiendo que es necesario hacerlo, sobre todo cuando se alcanza un ritmo en la carrera, sin embargo, yo pediría a las personas que escupan a un lado de la pista, en donde no se afecte la superficie por la que entrenamos”.
Aseguró, en cuanto a la limpieza del Bosque: “el personal de mantenimiento no se da abasto, creo que ese aspecto también se podría mejorar, ojalá se haga algo porque muchas personas se verían beneficiadas”.
REASIGNAR HORARIOS DE LIMPIEZA
Alfredo Puentes Cerda entrena regularmente en el Bosque Venustiano Carranza desde hace dos años, en su haber hay maratones, 21 K y varias carreras que se organizan en la región, y sobre las condiciones de este paseo comenta: “creo que es necesaria una pista de mayor extensión y de otra superficie porque quienes venimos aquí a prepararnos para las carreras necesitamos arcilla o tartán, las personas que acuden sólo a ejercitarse lo pueden hacer sobre la pista de cemento”.
Alfredo mandó un mensaje a las autoridades del Bosque: “por favor no hagan la limpieza cuando entrenamos, es desagradable que mientras realizamos nuestra actividad física nos avienten el polvo, considero que a partir de las 11 de la mañana ya se podrían hacer las labores de limpieza, cuando la gente se haya retirado”.
Pero una pista en mejores condiciones está en la mente de este corredor, por lo que al respecto agrega: “tengo entendido que ya existe un proyecto para construirla por fuera del Bosque, creo que sería necesario cerrar algunas calles aledañas, no se generarían problemas y las personas que acuden aquí a entrenar lo podrían hacer en condiciones muy favorables. Quienes entrenamos regularmente notamos la falta de una pista de tartán o arcilla, la superficie que hoy existe de cemento podría ser aprovechada por muchas personas para su ejercicio”.
Alfredo dijo finalmente que podar los árboles más seguido le vendría muy bien al Bosque: “eso ayudaría mucho, por lo demás, los corredores venimos a entrenar aquí porque se encuentran las mejores condiciones, tenemos bebederos en las cuatro esquinas del recorrido, además hay puestos de jugos y licuados, todo eso lo convierte en la mejor opción para nuestra actividad”.
EL BOSQUE ES DE TODOS
El Grupo Aeróbico Amigos del Bosque, turno matutino, trabaja en este escenario de lunes a viernes, a cargo del profesor Manuel Gilberto Meléndez Aguilar y varios de sus integrantes aseguran que en el espacio asignado para su actividad existen algunas carencias.
“La semana pasada hablamos con el alcalde, por casualidad lo encontramos en un restaurante mientras desayunábamos, ahí le hicimos algunas peticiones que se comprometió a resolver, pero hasta ahora no encontramos respuesta”, comentan varios integrantes del grupo, acompañados por su instructor.
El grupo habló sobre los problemas que enfrentan para realizar su actividad: “no tenemos energía eléctrica para la música que utilizamos; como nos lo indicaron, ya metimos la papelería a la Presidencia pero aún no hay respuesta, como se dan clases de Internet cambiaron el voltaje sin avisarnos y nuestro aparato se tronó al conectarlo. No pretendemos que nos regalen las cosas, buscamos que nos pongan un medidor independiente aunque tengamos que pagar”.
Se refirieron al espacio destinado a los aeróbicos: “la superficie es suficiente, por lo general acudimos alrededor de 80 personas, aunque en época de vacaciones el número se incrementa, necesitamos que nos emparejen el piso porque cuando llueve los charcos nos impiden entrenar, en ocasiones utilizamos el frontón, pero no siempre se nos dan las facilidades. También vemos cómo las tribunas se han deteriorado y es necesario darles mantenimiento, al igual que al foro, en donde el instructor nos muestra los ejercicios a realizar”.
Una necesidad manifiesta, más que nada por las mujeres, fue la de contar con vestidores: “también nos gustaría tener un locker y poder asearnos al término de nuestro entrenamiento, algunas terminamos bañadas en sudor y así nos retiramos, ya sea a nuestras casas o al trabajo. Para realizar esta actividad el Bosque nada aporta, lo hacemos por amor al arte e incluso pagamos cinco pesos por persona para los gastos”.
Aseguran que el problema de la energía eléctrica para la música lleva tres meses sin solución: “nos traen con muchas vueltas, a José Ángel Pérez le llevamos un pliego petitorio para que nos ayude a tener vestidores con baño y un lugar para guardar nuestra ropa, creo que es justo, el Bosque es un paseo público, es de todos los ciudadanos y merecemos que nos hagan caso, sería bueno que cuando menos nos apoyaran con la limpieza, ya que de nuestros bolsillos pagamos al barrendero”.
El grupo que encabeza Manuel Gilberto Meléndez Aguilar dijo finalmente que aún no entienden por qué les quitaron su instalación eléctrica: “se echan la pelotita, en la administración nos dicen que fueron los del frontenis, mientras que éstos aseguran que fue por órdenes del administrador”.
Se dijeron dispuestos a cooperar económicamente para mejorar su espacio, siempre y cuando su aportación realmente se utilice para las mejoras requeridas, como es también una malla para cuando llueve y vienen las inundaciones”.
PIDE MAYOR RESPETO
Una mujer de aproximadamente 22 años, que no quiso proporcionar su nombre, también dio su punto de vista sobre las condiciones del Bosque: “yo no soy corredora, empecé a venir hace como dos meses y lo hago dos o tres días a la semana, lo único que hago es correr, y como no aspiro a competir, las condiciones se me hacen buenas”.
Dijo que sí ha notado un problema grave en la pista: “la gente escupe demasiado, no hay conciencia, aunque veo que se han puesto avisos que piden a las personas no hacerlo, ojalá se hiciera porque le da otra cara a la pista y se entrena en mejores condiciones”.
Aseguró que desde hace dos meses acude al Bosque y está convencida que es la mejor opción para ejercitarse: “en condiciones generales lo encuentro limpio, quizá hagan falta más áreas verdes, es un espacio seguro, aunque existen personas jóvenes que sólo vienen a molestar, y como somos mujeres nos faltan al respeto, no se les puede impedir la entrada porque es un paseo público, pero ojalá tuviéramos alguna autoridad al pendiente para, en el último de los casos, quejarnos”.