En la colonia Enrique Martínez y Martínez alrededor de 300 familias están ‘colgadas’ a un poste. Ayer una persona intentó conectarse al servicio y provocó un cortocircuito que suscitó el pánico de la gente. Además, se quedaron sin luz casi todo el martes pasado.
MATAMOROS, COAH.- Las alrededor de 300 familias que habitan en la colonia Enrique Martínez y Martínez, estuvieron a punto de vivir una desagradable experiencia cuando un nuevo integrante de dicho sector, trató de conectarse al poste de luz donde toda la colonia está ‘colgada’, lo que originó una descarga eléctrica y dejó a todos sin luz casi todo el martes pasado.
En este sector los habitantes establecieron sus viviendas en terrenos que equivalen a 28 hectáreas. De los cuales 850 metros son propiedad de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que al enterarse que alrededor de 17 familias construían dentro de su espacio, dieron la orden de que pararan toda obra por ser predios federales, además de que la vida de las personas se encuentra en peligro por una posible descarga eléctrica.
Uno de los sustos más grandes que han tenido se presentó el pasado martes, cuando un cortocircuito seguido de una fuerte descarga eléctrica, dejó las viviendas sin el servicio. Además, según relatan algunos vecinos, hubo descompostura de aparatos eléctricos y que muchas personas corrieron de sus casas por el temor de una posible quemazón.
La vecina Sanjuana Rocha Esquivel, cuya vivienda se localiza en la avenida General Cepeda, dijo que muchas personas se enojaron con el hombre que originó el percance, “pues pudo causar una tragedia”.
En el poste ubicado entre las calles Ruiseñor y la calzada Los Lagos, que es donde están unas torres altas de luz, es donde corren los metros de cable que van a parar a las viviendas.
Sanjuana como María Cristina Santos Juárez, quien tiene su casa en la avenida Saltillo 247, informaron que una comisión de vecinos por la mañana acudió a las oficinas de la CFE, a fin de solicitarles que procedan ya a la instalación del tendido eléctrico.
“Al parecer la CFE no lo hace porque desea que las personas que construyeron bajo las torres dejen sus casas, pero la gente no quiere hacerlo aun cuando saben el peligro que eso representa para ellos y por esa razón, no hemos llegado a un arreglo con la paraestatal”, dijo Santos Juárez.
Las amas de casa manifestaron que todos los vecinos están dispuestos a pagar por el servicio, pues ya no pueden vivir con el miedo que representa estar ‘colgados’, “hay cientos de cables en las calles, además, no tarda una desgracia, por eso es mejor que las autoridades tomen cartas en este asunto”.