Elementos de varias corporaciones policiacas acudieron a la colonia IV Centenario para apoyar en un supuesto secuestro.
Nuevamente se registró una intensa movilización policiaca tras el reporte del secuestro de una menor, que a final de cuentas se trató de un caso de extorsión telefónica, donde los delincuentes se comunicaron a una vivienda de la colonia IV Centenario para decir que habían plagiado a una jovencita y que querían dinero a cambio de su libertad; sin embargo, cuando llegaron por lo menos media docena de patrullas al domicilio indicado apoyaron a las personas que recibieron el mensaje para localizar a la supuesta “levantada” y se percataron de que estaba en su escuela a salvo, sin que hubiera sido molestada por nadie.
Alarmados, algunos vecinos de la colonia IV Centenario salieron de sus casas para ver qué sucedía al escuchar un fuerte movimiento policiaco alrededor del mediodía de ayer, mientras que otros preferían encerrarse en sus viviendas ante el temor de que se pudiera registrar una balacera, pues se percataron de que las patrullas pasaban a toda velocidad.
“Pasaron por la calle Abasolo a toda velocidad, eran unas camionetas negras y unos vehículos sedán, no sabemos si eran de la Dirección Estatal de Investigación (DEI) o de la Policía Estatal Preventiva (PEP), pero como traían los códigos abiertos, nos asustamos, pensamos que ya había habido otra balacera”, comentaron los vecinos del citado sector.
Todos los habitantes alarmados se preguntaban qué había pasado hasta que uno fue al lugar donde se estacionaron las patrullas, en la avenida Centenario, entre Abasolo y Bravo, y escuchó decir a los agentes de la Policía Municipal, quienes llegaron primero al apoyo, que se trataba de una llamada de extorsión.
Al parecer, la familia que vive en el lugar citado recibió una llamada en la que les dijeron que habían secuestrado a su hija y que tenían que pagar cierta cantidad de dinero para dejarla en libertad, por lo que decidieron mejor pedir el apoyo a la autoridad, dándose de esta manera la movilización policiaca.
Los agentes comentaron que los familiares de la supuesta plagiada lograron comunicarse con ella y ésta les dijo que estaba en la escuela y que no sabía de qué le estaban hablando pues a ella no le había pasado nada.
Por tal razón, los policías se dieron cuenta de que se trataba de una llamada de extorsión de las que se han registrado en la capital, donde los delincuentes llaman a un determinado número y fingen la voz de niños para decir que están secuestrados y que tienen que pagar para que los suelten, sin que esto sea cierto, pues buscan que la gente “caiga” en su juego y deposite el dinero.