El Siglo de Torreón
Saltillo, Coah.- La empresa Industrial Minera México (IMMSA) suspendió ayer las brigadas de búsqueda y rescate de los 63 cadáveres atrapados dentro de la mina Pasta de Conchos, para no exponer a los brigadistas y restauradores de la cantera a una desgracia mayor a la del 19 de febrero del 2006.
La medida enfadó a los deudos que mantienen bloqueados los seis accesos al yacimiento, sin permitir la salida de los empleados administrativos y obreros que ingresaron en el primer turno.
Por la mañana, el representante de IMMSA, Enrique Valverde Durán, informó a las familias la decisión de suspender las acciones. Les dijo que la empresa no puede arriesgar la vida de los 95 trabajadores que bajan al yacimiento cada turno.
Les dijo que en la diagonal 17 de la mina, unos 600 metros después de la plancha, las concentraciones de gas metano son elevadas, pero no les precisó a qué grado.
Valverde Durán también les señaló estudios preliminares de laboratorio que advierten la posible presencia de bacterias en el agua que hay en el interior del socavón, como parte de la descomposición de los 63 cuerpos.
Un vocero de IMMSA rechazó en entrevista que la suspensión de los trabajos vaya a ser definitiva y tenga el propósito de sellar la excavación, dejando en su interior los 63 restos de igual número de trabajadores.
“La medida no es definitiva, es temporal y permanecerá hasta que las concentraciones de gas disminuyan y hasta que terminen los estudios de laboratorio sobre la supuesta presencia de bacterias en el agua”, dijo.
Explicó que la Procuraduría General de Justicia en el Estado ordenó a IMMSA una valoración profunda sobre las condiciones bacteriológicas del agua dentro de Pasta de Conchos.
Ante esto, dijo que la empresa encomendó la tarea al especialista Daniel G. Wooton.
Pero para familiares de las víctimas la medida forma parte de una estrategia de Grupo México para dar por terminada la recuperación de los cuerpos.
