Un hombre pasa por la Embajada de Corea del Sur en Kabul, Afganistán. Ayer talibanes amenazaron con matar 18 sudcoreanos y dos alemanes a los cuales mantienen como rehenes. (AP)
Kabul, afganistán.- Los talibanes amenazaron ayer con matar a los 18 misioneros sudcoreanos y los dos ingenieros alemanes que tienen como rehenes si las autoridades no les contactan antes de las 12:00 horas locales de hoy sábado.
El portavoz talibán Qari Mohammad Yousif Ahmadi dijo que ese es el plazo para que las autoridades les contacten para discutir sus demandas, entre ellas la retirada de las tropas que Alemania y Corea del Sur tienen destacadas en Afganistán.
También mencionó como exigencia que las autoridades afganas liberen a todos los talibanes que están encarcelados. Ahmadi añadió que, si las autoridades acatan el plazo dado, los talibanes “pueden ampliarlo”. “Pero, si no, mataremos a los rehenes”, amenazó.
Los 18 sudcoreanos, 15 de ellos mujeres, son misioneros cristianos evangélicos que fueron secuestrados el jueves en la provincia de Ghazni (este) mientras los alemanes son dos ingenieros tomados como rehenes el día anterior en la vecina de Maidan Wardak.
Aunque los talibanes habían reivindicado el secuestro de los misioneros, sólo Ahmadi confirmó ayer que los germanos están en su poder.
Junto a los extranjeros, también fueron tomados como rehenes los afganos que los acompañaban en el momento del secuestro, cuatro con los sudcoreanos y cinco con los alemanes. Los voluntarios cristianos fueron secuestrados en la localidad de Qara Bagh (Ghazni) cuando viajaban en un autobús entre la sureña Kandahar y la capital del país, Kabul.
“Un consejo talibán decidirá qué hacer con ellos”, habían dicho los talibanes hace horas, en un comunicado en lengua pashtún difundido por su página Web.
Un portavoz del Ministerio de Exteriores en Seúl había alertado antes del posible secuestro de “unos 23 misioneros cristianos”, al informar de que estaba intentando verificarlo a través de varios canales y de que se había formado un comité de coordinación con la embajada sudcoreana en Afganistán.
Poco más tarde, el subjefe provincial de la Policía de Ghazni, Mohamed Zaman, anunció que un “gran número” de efectivos policiales fue enviado a la zona para buscar a los secuestrados, que cuantificó en 16 personas.
Zaman culpó a los secuestrados por no llevar escolta y por no haber informado a la Policía de la ruta que pensaban seguir. Corea del Sur tiene desplegados en Afganistán unos 200 soldados dedicados a labores de reconstrucción y además en el país hay unos 120 misioneros cristianos.
Por su parte, Alemania tiene destacados tres mil soldados dentro del contingente de la Fuerza de Asistencia para la Seguridad (ISAF, bajo mando de la OTAN).
Los alemanes secuestrados el miércoles pasado son dos ingenieros que trabajan para una compañía privada de construcción y cayeron en manos de los talibanes en el distrito de Jaghato, en la provincia de Maidan Wardak (centro).
Mientras una fuente oficial afgana anunciaba el jueves el comienzo de una “intensiva búsqueda” para dar con ellos, un portavoz del Ministerio de Exteriores alemán confirmaba su desaparición y anunciaba que la Embajada en Kabul y las autoridades relevantes estaban intentando recabar más informaciones sobre los dos hombres.