Cuando los Indios de Cleveland estaban a punto de lograr la gran sorpresa de ganarle la serie a los Medias Rojas para de esa manera llevarse la corona de la Liga Americana y asestarle una dura tunda a la cátedra que los puso como grandes favoritos, el equipo de Boston reaccionó antes de la eliminación y al igual que en 2004 estarán en la Serie Mundial, ahora contra los aguerridos Rockies de Colorado.
El pitcher Josh Beckett, el único ganador de 20 juegos en la temporada de Ligas Mayores, fue elegido el Jugador Más Valioso de esta serie final al ganar dos juegos, el primero y el quinto, este último cuando los Indios estaban a solamente un triunfo de ganar la final. Ahora Beckett estará listo para iniciar el miércoles la Serie Mundial en Boston contra los Rockies que llevan tanto tiempo sin jugar.
El clásico de octubre volverá a comenzar en un parque de la Liga Americana al haber ganado el Juego de Estrellas, por lo que Medias Rojas comenzará en casa y terminará posiblemente en el hogar también. Es curioso que por primera vez desde que los Juegos de Estrellas deciden en dónde arranca la Serie Mundial estuvo a punto de suceder que el héroe del clásico de media campaña estuviera en la gran serie. Un cuadrangular de Víctor Martínez, de los Indios de Cleveland, fue decisivo para que ganara la Liga Americana a la Liga Nacional y el muy buen catcher y bateador es parte de los Indios de Cleveland que se les escapó de las manos su arribo a la Serie Mundial.
Después de perder contra Beckett en el quinto juego los Indios sabían lo difícil que iba a ser ganar un juego de los dos que quedaban en Boston y el dominicano Fausto Carmona fue el gran chivo de la serie con dos horribles salidas, aunque el grandulón CC Sabathia tampoco estuvo a la altura. Uno se pregunta por qué los Indios llegaron tan lejos con tantas deficiencias en papel, pero a través de 170 juegos fueron los mejores hasta que, de repente, se les acabó su noviazgo con la hermosa señorita victoria.