Ernesto Alonso Ramírez, conocido como el "El señor telenovela", quien murió en la madrugada de hoy, debutó en la industria cinematográfica como extra en la película La Sandunga, en 1938, de la mano de la actriz Lupe Vélez.
Sin embrago el actor y productor siempre consideró que su primera aparición tuvo lugar en la cinta Historia de un gran amor, al lado de Gloria Marín y Jorge Negrete, en 1942, de acuerdo con el portal electrónico de Televisa, empresa donde desarrolló la mayor parte de su carrera actoral.
De pronto le llegó la gran oportunidad de trabajar al lado de un grande del celuloide, el español Luis Buñuel, quien le brindó la oportunidad de narrar el film Los Olvidados, en 1950. También participó en Abismos de pasión (1954) y Ensayo de un crimen (1955) junto a la actriz Miroslova, ambas bajo la dirección de Buñuel.
Su paso por el cine le dejó amistades entrañables con las actrices Andrea Palma, María Félix y Dolores del Río.
Alonso se retiró prematuramente del cine en 1957 con la película La Torre de Marfil, al lado de Marga López.
Sin embargo, el parteaguas en su carrera se registró en 1959, cuando Emilio Azcárraga Vidaurreta, fundador de Televisa, lo llamó para hacer televisión.
Después la amistad se consolidó con Emilio Azcárraga Milmo "El Tigre", quien de según versiones del mismo emporio televisivo, "le dijo que como actor de cine tal vez no podría durar toda la vida, pero como productor sí".
En 1960, Alonso debutó como productor de telenovelas con El Otro (1960).
El señor telenovela participó en alrededor de 130 melodramas entre los que destacan El Derecho de nacer (1966), Corazón Salvaje I (1966) El Maleficio I y II (1983), Bodas de Odio (1983), El Vuelo del Águila (19966), Entre el amor y el odio (2002) y Amarte es mi pecado (2004). A finales de 2005 Ernesto Alonso produjo lo que sería su última telenovela: Barreras de amor, protagonizada por Yadirah Carrillo y Sergio Reynoso.
Ernesto Ramírez Alonso nació en 1917 en Aguascalientes y estudió teatro en el Instituto Nacional de Bellas Artes. En Televisa se anuncian los preparativos de un homenaje póstumo, que El Señor Telenovela siempre rechazó en vida.