Santos Laguna jugó bien, hilvanó buenas jugadas pero ha perdido el marco contrario. No sabe dónde se ubica. Y afortunadamente ya tiene un buen cobrador de tiros penales en la persona de Juan Pablo Rodríguez, que anotó la pena máxima a los Tecos.
Pero, también en el segundo tiempo, Hugo Droguett disparó y la pelota controlable la soltó Oswaldo y llegó Emmanuel Villa solo para empujarla adentro y empatar. Así se escribió otra página triste de este equipo que ha perdido el rumbo al ataque.
Y para colmo de males de los locales, pronto Matías Vuoso tuvo que salir lesionado, tomando su lugar Oribe Peralta. Luego vendría la lesión de Oswaldo, que permitió la presentación del zacatecano Francisco González, pues Pedro Hernández está lesionado.
Y ya para terminar, Eliomar Marcón también fue lesionado, dejando otro saldo desfavorable para Santos, y obligándolo a seguir caminando en la cuerda floja, como le ocurre hace mucho tiempo. Con el agravante de que ahora se va contra el América.
Vimos a un Santos jugando inspirado, robando balones, haciendo buenos avances, pero mostrando nuevamente que ha perdido el marco contrario, pues sus remates van arriba, rumbo a las gradas donde los aficionados no quieren tener la pelota.
Y como se esperaba, el que se llevó la gran ovación fue Rodrigo ?Pony? Ruiz y antes de arrancar las acciones hubo un minuto de silencio en memoria de Grimaldo González, el peruano que vino a ayudar al futbol lagunero y que se quedó por siempre con nosotros.
