Complicado lucía al principio el partido de los Sub-20 entre México y Gambia. Los morenos dominaban y los nuestros no atinaban a ponerse las pilas. Una y otra vez los disparos africanos ponían nervioso al técnico Jesús Ramírez.
Pero apareció la primera gran figura de los mexicanos, el portero Alfonso Blanco, quien estuvo atento a todo lo que se le enviaba, y luego el partido empezaría a definirse con el golazo de Giovanni Dos Santos, quien mostró gambeta y luego esa zurda privilegiada.
Cayó el primer gol mexicano y después todo fue hilar y cantar, pues Héctor Moreno anotaría el segundo y el tercero iría por cuenta de Javier Hernández. Por los morenos, los peligros los pusieron Manou Bojang y Pa Madu Jagne.
Fue una lástima no ver en acción al lagunero Osmar Mares, y será difícil que tenga oportunidades, pues el puesto que desempeña en la cancha lo tiene desde hace tiempo Adrián Aldrete, moviéndose por el carril izquierdo.
Sin embargo, a Osmar le servirá mucho este viaje, pues bastante se aprende en una Selección Nacional, visitando otros países y conociendo el estilo de jugar de representantes de otras naciones alejadas de nuestro espacio.
Y esta tarde México va a su tercer partido, y esperamos otra victoria, ahora ante los alicaídos chilenos, que empezaron a tambor batiente venciendo a Ecuador y luego cayeron ante los brasileños, con tres goles de Robinho.