Casi en todos los partidos amistosos de Santos en esta pretemporada, una de las figuras más destacadas ha sido Agustín Enrique Herrera Osuna, quien ni siquiera estaba contemplado al inicio del anterior torneo.
Ante las lesiones y la falta de rendimiento de varios titulares, Agustín fue llamado al primer equipo, y desde su arribo empezó a mostrar su capacidad ofensiva, anotando goles importantes que ayudaron a cambiar el triste panorama que se vivía.
Él dice que no ha logrado nada aún, y por ello llega cada mañana temprano a Santa Rita, donde es de los más entusiastas y de los que se acercan a oír consejos, buscando aprender no sólo lo esencial, sino también aportar lo propio.
Sus compañeros de equipo, que han estado a su lado en fuerzas inferiores, lo animan, lo estimulan cada día, y él se siente fortalecido por lo que va logrando en cada entrenamiento y en cada partido amistoso.
Esta semana, ante Alacranes de Durango volvió a hacerse presente en el marcador, a pesar de que la zaga arácnida tiene buenos elementos, como es el caso de Víctor Santibáñez, un lagunero que ha militado en varios equipos como el América.
La carrera de Agustín sigue a la alza, y quienes han seguido sus pasos le aconsejan no desviar el camino, y le señalan los errores que ha cometido gente de ofensiva del equipo lagunero. Él escucha con respeto y sigue adelante con su carrera.
