Otra vez la mancuerna formada por Daniel Ludueña y Christian Benítez volvió a funcionar de maravilla, esta vez en el mismo infierno, a donde fueron los Guerreros en busca de otros tres puntos, los que consiguieron con fuerte presión en los últimos minutos.
Christian Benítez había ya anunciado su presencia, cuando a los 34 mandó disparo que con dificultades desvió Hernán Cristante, y ocho minutos después Ludueña dio un pase al ecuatoriano por entre un mar de piernas, para que Christian anotara su primer gol.
Ya marcaba el reloj los primeros 45 minutos de juego cuando Matías Vuoso disparó fuerte, rechazando con las piernas Cristante y el balón llegó a donde estaba Juan Pablo Rodríguez, quien de volea mandó el escopetazo para un golazo, el segundo de Santos.
Preocupación en la banca lagunera porque Rafael Figueroa lucía lesionado, después de intervenir en un avance toluqueño. La cancha era una trampa para todos, desprendiéndose su pasto y haciendo perder el equilibrio a todos.
Ariel Rosada encontró huecos en la media y la defensa, y en jugada personal anotó el primero para los Diablos, pero un tirón de Almazán dentro del área obligó la marca del penal que ejecutó con maestría Daniel Ludueña al doblar las manos de Cristante.
Vendría la reacción toluqueña con un disparo de Antonio Naelson “Sinha” que buscó Carlos Esquivel y no tocó, aunque a éste le acreditaron el gol que no pudo detener Oswaldo Sánchez. Santos Laguna consiguió así otros tres puntos en busca de su salvación.
