La cuenta pendiente del torneo anterior quedó saldada anoche en el Estadio Miguel Hidalgo, donde Santos Laguna, con tarjetas amarillas, antes de iniciarse el partido, durante el mismo y hasta una roja, logró vencer al Pachuca, campeón del futbol mexicano.
Fue un triunfo indiscutible, lleno de dramatismo por tantos desatinos de Jorge Eduardo Gasso, de pésimo arbitraje para el equipo de la Comarca, pero Santos iba por todo, y aún con diez hombres pudo alzarse con la victoria de 0-1.
Ya no hay dudas de quién es en este momento el superlíder del futbol mexicano, y el orgullo de todo el norte de México. Otra vez los once laguneros se vistieron de Guerreros desde antes del encuentro y supieron imponerse a un gran rival.
Estas cuatro jornadas victoriosas vienen a ser uno de los más elocuentes festejos del Centenario, y la nueva gran figura del equipo lo es Daniel Ludueña, a quien debió acreditársele ese gol que doblegó a los orgullosos campeones de aquí, allá y acullá.
Vienen este miércoles las Chivas Rayadas, una buena oportunidad para seguir pisando firme e ir el sábado hasta Cancún, y no de paseo, a disfrutar de las arenas blancas, sino a luchar para seguir sumando, pues hay que desaparecer ese fantasma del descenso.
Otra gran noche de Oswaldo Sánchez, deteniendo todo y empujando a sus compañeros a la victoria. Se imaginará cómo estará el miércoles el Corona. Lástima que aquí no se pueda ver en televisión abierta este encuentro, pero ojalá salga un gran gestor y lo logre.
