Nadia Porras tiene solamente 15 años y sus triunfos en la natación la han convertido en una de las mejores deportistas de nuestro país. En los pasados Juegos Parapanamericanos, celebrados en Río de Janeiro, sus victorias fueron orgullo para México.
En aquél suplemento de los martes que presentó este Diario por espacio de ocho años, dimos a conocer los primeros triunfos de esta deportista lagunera, que iba llenando las vitrinas de su casa con medallas de oro y de plata, ganadas en las piscinas mexicanas.
Luego se fue al extranjero y sus logros aumentaron, hasta convertirse en los pasados Juegos Parapanamericanos en una de las figuras más sobresalientes del deporte mexicano. Pero de Nadia sorprenden gratamente muchas cosas.
Como esa alegría que tiene por vivir, como ese entusiasmo por todo lo que hace, lo que motiva a más jóvenes de su edad a ser mejores como personas cada amanecer. Qué orgullosos deben estar sus padres de ese regalo que El Señor les dio en la persona de Nadia.
Su ejemplo nos recuerda a Juanito Lara, el gran deportista lagunero que por cuestiones de salud tuvo que retirarse de los maratones y de las carreras de largas distancias. Hoy sigue pendiente de todo lo que ocurre en el atletismo lagunero, pero ya no participa.
Sin embargo, lo que hizo lo convirtió en uno de los grandes del deporte lagunero, especialmente aquella ocasión en que corrió 100 kilómetros para reunir fondos para personas con capacidades diferentes, todo un ejemplo digno de un gran campeón.