Lamentablemente, Santos Laguna no pudo mantener el mismo ritmo ni la misma enjundia de la primera parte. Se fue al descanso con un marcador a su favor de 2-1, tantos anotados por Daniel Ludueña, y el de los rivales por Carlos González.
En ese intermedio, la afición, que entusiasta llenaba el Corona, tenía fe plena en su equipo, que era quien arrollaba y mandaba en la cancha, pero el descanso les hizo daño a los Guerreros, pues regresaron fríos y confiados y pronto ya tenían otro gol en contra.
Ignacio Scocco, avivándose, mientras los locales pedían el fuera de lugar, marcó el que le daría su pase a la final, pues aunque Santos hizo otros dos goles, por conducto de Matías Vuoso y uno más de Daniel Ludueña, no le alcanzó y quedó eliminado con un 4-5 global.
Pero los aficionados no estaban tristes, sino que con entusiasmo premió con aplausos a los jugadores locales. La gente no abandonaba las tribunas, recordando que se entró a este torneo buscando la salvación y por poco se llega a la final.
Pesó como gigantesca losa esa goleada de 3-0 que los de la Comarca recibieron en C.U. Ayer empezaron a tambor batiente, pero nuevamente desatenciones defensivas fueron la diferencia. Y luego ese bajón de juego de la segunda parte influyó también.
Santos se va al descanso y luego vendrá la etapa de reestructurar al equipo, pues hay jugadores que no han cumplido, sobre todo los que llegaron al último, y quizá se busque llenar algunos huecos, pero todo vendrá a su tiempo, después de la pausa obligada.