Urge a ladrilleros camiones

El Siglo de Durango

El cuello de botella del Parque Industrial Ladrillero (PIL), para que finalmente se reubique la mayor parte de los obrajeros que todavía se encuentran en la ciudad de Durango, reside en la necesidad de dos camiones más (que no tienen), que pudieran trasladar mayor cantidad de ladrillo.

Actualmente el PIL produce un millón 200 mil ladrillos al mes, de los que cerca de 704 mil son vendidos a través de los contratos y traslados que hace la Administración del PIL, para con constructores y demás clientes, el resto se vende en forma privada, lo cual quiere decir que las personas físicas o morales interesadas en adquirir el producto van hasta las instalaciones del PIL para obtener el producto.

Según lo comentó el encargado del PIL, Francisco Curiel García, quien se encuentra al frente de este lugar desde el mes de abril, actualmente se encuentra laborando un total de 120 obrajeros en las instalaciones de este complejo. Dijo desconocer si es que el número de obrajeros ha disminuido, aunque afirma que ha escuchado rumores de que es cierto.

Aunque hay que mencionar que Carolina Uriarte Rodríguez, titular de la Dirección Municipal de Promoción Industrial, Comercial y Turística, desde hace algunos meses mencionó que fueron 155 obrajeros los que habían aceptado la reubicación al PIL, sin embargo, esta cifra ha bajado hasta 120, según lo confirmó Francisco Curiel.

Reconoció que el PIL no ha crecido a causa de que sólo existen dos camiones de plataforma, con capacidad de unas 15 a 16 toneladas de transportación por viaje, que son los que dan el servicio de traslado del producto a los diferentes clientes que hay en la ciudad de Durango.

Al respecto expuso que en cada viaje se pueden transportar ocho mil ladrillos a granel, mientras que cuando se utilizan tarimas, el cupo es sólo de unos seis mil.

Todo lo anterior parece ser un círculo vicioso, puesto que no se puede producir mas ladrillo, ya que tampoco hay capacidad de transportar más producto. Los camiones pueden hacer dos viajes diarios con lo que pueden hacer entrega de unos 32 mil ladrillos al día. El sábado sólo hay capacidad para un viaje.

Lo anterior permite sólo un nivel de producción, pues aunque pudiera existir más, los camiones no se dan abasto para cumplir con mayores compromisos. En este sentido, existen ladrilleros que van y queman una vez por semana, una vez cada quince días y hay quienes también lo hacen una vez al mes, pues la mayor parte de ellos piensa que aún no es tan rentable.

Por ejemplo el ladrillero José Juan Vargas Mendoza de 37 años dice trabajar en el PIL desde hace un año y concuerda en que el cuello de botella son los camiones y afirma que si hubiera más podría haber mayor producción, lo que se traduciría en mayor dinero.

Incluso la demanda de los constructores, por ejemplo de la Cámara Nacional de Desarrolladores de Vivienda (Canadevi), es muy alta y no se le puede dar abasto a sus peticiones, pero porque no existen los camiones suficientes para dar el servicio.

Francisco Curiel afirmó que los camiones que actualmente están funcionando son del Municipio, y que se está tratando de buscar algún financiamiento para conseguir otros dos, pero aún no hay nada claro.

No dudó en recomendar a la ciudadanía a que pueda cooperar en una campaña de redondeo para adquirir estos camiones, con lo que incluso los mismos duranguenses se beneficiarían para terminar con la contaminación que continúa registrándose en el oriente de la ciudad.

Según Curiel García si hubieran dos camiones más funcionando, lo anterior no sólo provocaría mayor producción de ladrillo, sino que motivaría la reubicación de más y más obrajeros al PIL, por lo que indicó que se tienen esperanzas de que lo anterior puede resolverse pronto.

Costos, otro problema

Las ganancias que por lo pronto se están obteniendo en la producción de ladrillo son muy raquíticas, según opinó otro de los ladrilleros que trabajan en el PIL, como en este caso fue Vicente Sánchez Valdez de 32 años de edad, quien expuso que todavía es muy mal pagado el ladrillo.

El precio al cual venden su producto es un peso por cada uno. Ya cuando se le invierte flete, los precios de carga y descarga viene quedando una ganancia de 0.80 centavos, pero según el informante se tiene que invertir por lo menos 0.75 centavos en la producción de cada uno. La ganancia finalmente es de 0.5 centavos de peso.

Para Vicente Sánchez la solución no sólo es que haya más camiones sino que también se mejore el precio, indicó mientras formaba decenas y decenas de ladrillos, bajo el arduo sol del medio día que ya comenzaba a quemar y a calar en la piel.

Por su parte el PIL también está tratando de ayudar en varios aspectos, como es el subsidio al flete, al cual le invierten más del 50 por ciento en la transportación del ladrillo. “Normalmente el costo de un flete puede costar 110 pesos por cada millar de ladrillo trasladado, pero aquí les ayudamos”, expuso Francisco Curiel.

Los ladrilleros también son apoyados con el transporte de un autobús que diariamente desde las 07:30 horas los recoge en diferentes colonias, para llegar alrededor de las 08:30 horas del día y así comenzar a trabajar. El costo del pasaje es de apenas cinco pesos, con lo que también se está subsidiando el precio, pues una tarifa normal que les dan líneas de autobuses es de 15 pesos. Los ladrilleros, una vez que terminaron su trabajo se van a las 17:00 horas de vuelta a la ciudad de Durango.

Cabe recordar que el PIL se encuentra a aproximadamente 25 kilómetros de la capital duranguense y a tres kilómetros del poblado José María Pino Suárez.

La primera etapa del PIL se ubicó con 158 lotes, que como el igual que en las demás etapas se componen de un terreno de 700 metros cuadrados, que, además, está equipado con un tinaco, un quemador ecológico además del lubricante o aceite usado.

La segunda etapa se conforma por 197 lotes, y los 120 ladrilleros están distribuidos en la primera y segunda etapas, aunque hay una tercera en la que aún no se ha trabajado, puesto que hay que construir los obradores que según el proyecto deben ubicarse en 197 lotes más.

Caber recordar que el objetivo de la construcción del PIL fue reubicar a los casi 500 ladrilleros que había en la ciudad de Durango así como reducir los niveles de contaminación que había en la capital, ya que fueron considerados como los principales promotores de la polución que se producía en esta área.

De este modo la utilización del aceite es menos dañina al medio ambiente, mismo del que se obtienen alrededor de ocho mil 500 litros mensuales, que se recolectan en alrededor de unos 120 talleres mecánicos.

Según Francisco Curiel hasta el momento no han tenido problema por el abasto del aceite, pero si se diera el caso de que se reubicaran más ladrilleros para el día de mañana, se montaría la estrategia adecuada para abastecer el producto.

El encargado del PIL asegura que actualmente están listos para trabajar 144 lotes. “En caso de que el día de mañana vinieran 144 obrajeros a solicitar su espacio, el PIL estaría listo para trabajar de inmediato”, expuso.

Estrategias de trabajo

De los 120 ladrilleros que se encuentran trabajando en el PIL, aproximadamente entre el 25 al 30 por ciento se queda en el almacén o bodega, en el cual fabricaron un “jacalito”, para continuar trabajando al siguiente día.

Otro 25 por ciento de los ladrilleros que laboran en el PIL vive en el poblado José María Pino Suárez, que se encuentra a tres kilómetros de las instalaciones y finalmente el resto es el que va y viene todos los días a la ciudad de Durango.

Funcionamiento

Del Parque Industrial Ladrillero

· Actualmente se fabrica y vende un millón 200 mil ladrillos al mes

· La producción exige poca afluencia y asistencia de ladrilleros en el Parque Industrial Ladrillero

· Para tal efecto existen dos camiones para transportar el ladrillo que les da una capacidad de 704 mil unidades al mes

· El resto se vende a través de transportación privada a los clientes

· Están laborando 120 ladrilleros en el Parque Industrial Ladrillero

· Existen 144 obradores adicionales en estos momentos para funcionar

Propuesta

Para mejorar producción y reubicación

· Fabricar un promedio de dos millones 400 mil ladrillos al mes o incluso más

· Adquisición de dos camiones más con lo cual la plantilla subiría a cuatro

· Se generaría mayor demanda que se traduciría en una mayor afluencia de ladrilleros en el Parque Industrial Ladrillero

· La generación de mayor producción podría generar atracción de más ladrilleros que aún se encuentran en la ciudad de Durango

· Mayor surtimiento a las cámaras industriales y a los constructores

· Posibilidad de utilización de 144 obradores más en forma inmediata y de proyección de la tercera etapa del Parque Industrial Ladrillero para recibir al mayor número de obrajeros en este lugar

Fuente: Subdirección de Promoción Industrial, Comercial Turística