Ante la falta de boyas y bordos sobre la avenida Madero, automovilistas y camioneros circulan a exceso de velocidad, lo que para los vecinos de la colonia Polvorera representa un peligro.
Vecinos se quejan porque choferes de camiones, taxistas y hasta policías en sus patrullas exceden el límite de velocidad
TORREÓN, COAH.- Para los vecinos de la colonia Polvorera, los camiones urbanos, taxistas e incluso unidades de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, son una “amenaza”, ya que aseguran que pese a contar con calles muy estrechas, éstas son tomadas como “pistas de carreras”.
Es sobre la avenida Gustavo A. Madero en donde se registra el problema. María Teresa Reyes, vecina de este sector habitacional, menciona que ante la falta de boyas o bordos, cualquier automovilista, ya sea de una ruta urbana o incluso patrullero de la DSPM, circula a alta velocidad sin precaución alguna.
De acuerdo con María Teresa, los automovilistas comienzan su carrera de la calle Segunda hasta la calle Cero de esta colonia, sector en el que asegura, se han registrado ya varios accidentes.
“No respetan los límites de velocidad a pesar de que contamos con una escuela primaria”, dice preocupada María Teresa.
Cecilia Ríos, por su parte, menciona que debido a que las banquetas también son muy estrechas, los vecinos prefieran caminar por la orilla de la carretera, “lo que lo hace más peligroso porque los automovilistas pasan a toda velocidad”.
Colocar boyas sería inútil, dicen ambas vecinas, “pues terminan con quitarlas, han colocado muchas y nunca pero nunca solucionaron el problema”, dice Cecilia.
Martha, también vecina, comenta que los accidentes son cada vez más frecuentes, “los niños nada más se atraviesan y es que no miden el peligro”.
Es por ello que las amas de casa recomiendan a las autoridades municipales, destinar un agente de Vialidad sobre la avenida Gustavo A. Madero, “por lo menos a la hora de salida de los pequeños tanto al mediodía como por las tardes”, comentaron las mujeres.
Mientras tanto, los vecinos de la colonia Polvorera seguirán extremando sus precauciones, como es el caso de María Teresa, quien procura no salir a las horas pico, de lo contrario trata de caminar por las banquetas, “y así podremos evitar cualquier accidente”.
NO MIDEN EL PELIGRO
"Los niños nada más se atraviesan y es que no miden el peligro"
MARTHA, VECINA
