De los mexicanos que radican hoy en Estados Unidos, el 38 por ciento se concentra en California, el 20 por ciento en Texas, y el 6 por ciento en Illinois. (Archivo)
Viven sólo en California más mexicanos que en 27 de los 32 estados del país.
MÉXICO, DF.- Más de 2 millones de mexicanos emigraron a Estados Unidos durante el sexenio del presidente Vicente Fox, de acuerdo con datos de la Oficina del Censo estadounidense.
En el año 2000 vivían en Estados Unidos 9 millones 177 mil personas nacidas en México; para 2006 esa cifra se elevó hasta los 11 millones de 541 mil mexicanos, establece la Encuesta de la Comunidad Americana (ACS, por sus siglas en inglés).
Los datos de la Oficina del Censo estadounidense indican que la migración mexicana en la Administración Fox mantuvo el patrón de las últimas décadas (de casi 400 mil emigrantes cada año), pero creció de manera más acelerada en algunos estados.
De los mexicanos que radican hoy en Estados Unidos, el 38 por ciento se concentra en California, el 20 por ciento en Texas y el 6 por ciento en Illinois.
La población de paisanos en California, 4 millones 396 mil, es mayor que la población de 27 de los 32 estados de México contando al Distrito Federal. En 11 de los 52 estados de la Unión Americana el número de mexicanos supera los 200 mil.
Los estados de Estados Unidos con mayor incremento en el número de residentes nacidos en México entre 2000 y 2006 fueron Carolina del Norte y Georgia, con crecimientos del 48 y 45 por ciento respectivamente, para alcanzar los 254 mil y 230 mil inmigrantes respectivamente.
En Nueva York el número de paisanos pasó de 187 mil a 230 mil en el mismo periodo.
Según la ACS, sólo el 4 por ciento de los residentes mexicanos que ingresaron a Estados Unidos después de 2000 cuenta con la ciudadanía estadounidense. La encuesta revela además que cuatro de cada 10 paisanos que migraron a EU en el pasado sexenio son mujeres.
En su mensaje de toma de posesión como presidente, el primero de diciembre de 2000, Fox planteó como uno de los siete ejes de su Gobierno el crecimiento con estabilidad en la economía para evitar que los jóvenes tuvieran que dejar su hogar y emigrar a otro país.
“Una de las cosas que más duelen es ver cómo cada año, cientos de miles de mexicanos, muchos de ellos bien preparados, tienen que emigrar a Estados Unidos y Canadá para encontrar ahí trabajo y oportunidades que les son negados en su propio país”, señaló.
“Haremos lo esencial y trabajaremos para que pronto encuentren las oportunidades que fueron a buscar, porque México les necesita a todos ellos”, prometió.
De acuerdo con estimaciones del Consejo Nacional de Población (Conapo), la pérdida neta de habitantes en México por la migración internacional pasó de 290 mil en los 70 a 3.3 millones en los 90.
El organismo calcula que una tercera parte de los mexicanos que migraron a Estados Unidos en el sexenio pasado procedían de Michoacán, Jalisco y Guanajuato.
En un reporte presentado en agosto pasado, el Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos indicó que el número de mexicanos indocumentados en ese país pasó de 4.7 a 6.6 millones entre 2000 y 2006.
“El promedio anual de incremento de migrantes mexicanos indocumentados fue de 315 mil durante ese periodo”, apuntó.
En tanto, el promedio de mexicanos naturalizados cada año en Estados Unidos durante el sexenio pasado fue de 75 mil.
Busca CNDH despenalizar la migración en México
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) promueve en el Congreso de la Unión la despenalización de la migración en México, a fin de que se eliminen de la legislación los dos años de prisión establecidos para aquellas personas que ingresan de manera ilegal a nuestro territorio.
Este organismo consideró que la criminalización de la migración no sólo es contraria a los acuerdos internacionales, sino que “es terreno fértil para la extorsión, la amenaza y la arbitrariedad”.
Indicó que es incongruente que “protestamos como país ante las medidas que adopta Estados Unidos respecto de la migración de mexicanos y demandamos que no se penalice a nuestros connacionales que de manera indocumentada se internan en ella y al mismo tiempo mantenemos en nuestra legislación una sanción de dos años de prisión a los extranjeros que se internan ilegalmente a nuestro país”.
El presidente de la CNDH, José Luis Soberanes Fernández, manifestó que, no obstante el incremento en el número de migrantes mexicanos y centroamericanos hacia los Estados Unidos de Norteamérica -que ha hecho de la migración un fenómeno “mucho más visible”-, los países siguen sin darles la debida atención “pues con excepción del interés en sus remesas económicas, prevalece hacia ellos la indiferencia, la contención, la criminalización y el abandono”.