El sinaloense reconoce que siempre le seducirá la idea de representar a México, aunque -para hacerlo- primero debe sentirse apto.
EL UNIVERSAL
MÉXICO, D.F.- Desde que México quedó eliminado de Alemania 2006, Jared Borgetti expresó que su etapa en la Selección Nacional estaba cerca de terminar.
A sus 33 años de edad, el goleador sabe que no estará en Sudáfrica 2010: "Estaría mal que me pusieran. Sería lo peor que le pudiera pasar al futbol mexicano", aunque parece tener un último deseo tricolor: disputar la Copa América Venezuela 2007.
"Dios quiera. Primeramente, hay que estar bien aquí con Cruz Azul y, dependiendo de eso, seguramente el director técnico verá si estoy en condiciones para estar dentro de la Selección", afirma. "No por ser Jared Borgetti tengo que estar. Hay que ganarse el lugar y poder darle lo que necesita: un buen jugador, que se entregue dentro de la cancha".
Lo cual, considera, podría aportar en el futuro próximo. El sinaloense reconoce que siempre le seducirá la idea de representar a México, aunque -para hacerlo- primero debe sentirse apto. "Algo en corto, puede ser", admite, mientras esboza una pícara sonrisa. "Que el director técnico de la Selección piense que le puedo ser útil para el grupo y sistema que quiere, puede ser, pero lo más importante siempre va a ser la Selección, sin importar los nombres que estén dentro de la cancha".
Por eso, recomienda, la prioridad debe ser empezar a trabajar con la base que participará en la próxima Copa del Mundo. "Lo que se tiene que buscar son futbolistas que tengan un proceso de aquí al Mundial, que lleguen con bastantes partidos al momento de estar peleando la clasificación", asegura. "Eso será muy importante".
