El que anda acaparando los medios nacionales es el gober, Humberto Moreira, quien advirtió que en Coahuila no pasará la controvertida reforma electoral, es decir, el profe ya tiro línea a los legisladores del PRI que son mayoría para que el Congreso Estatal rechace la propuesta que impide a los políticos comprar espacios en radio y televisión. Según el gober, la reforma es un insulto al pacto federal pues “permite que extraños vengan a organizar nuestras elecciones”. Al parecer la molestia del profe Moreira es que al igual que su antecesor, Enrique Martínez, sueña con ser presidente de la República de ahí que necesite de los “spots” televisivos para ser conocido en todo el país y afianzar su imagen para alcanzar la candidatura en el 2012. Obviamente con sus declaraciones, para variar incendiarias, ya logró que las televisoras y las estaciones de radio a nivel nacional, principales opositoras a la reforma, le den jugada en espacios estelares. El mundo es de los vivillos.
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Ya entrado en los temas de encabezar movimientos “nacionalistas”, don Humberto se aventó la puntada el domingo 16 de septiembre que impulsará una movilización abanderada en el supuesto de que el Padre de la Patria, Miguel Hidalgo y Costilla, no es el mismo que nos ha enseñado por décadas en la clase de historia. Según el gober, el cura Hidalgo sí fue caudillo y se le debe homenajear como el prócer de la Independencia, pero asegura que su imagen pública, la cual conocimos por estampitas para hacer la tarea en primaria, no obedece a la que realmente tenía. Según Moreira, el verdadero líder independentista “era más cachetón”… ¿Será?
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Pero las fiestas patrias no sólo sirvieron para que Moreira cuestione la imagen que nos enseñaron en la primaria de Hidalgo, también fue el pretexto perfecto para que este lunes los empleados municipales de Lerdo y Francisco I. Madero no fueran a trabajar. A pesar de que el lunes fue 17 de septiembre y el calendario marca como el Día de la Independencia el 16, los políticos decidieron alargar el fervor patrio y así evitar la molestia que da el regresar a trabajar, -bueno, mejor dicho asistir a sus oficinas- el lunes. En Lerdo este fue el primer puente de la Administración que encabeza el priista Carlos Aguilera, la cual lleva apenas dos semanas de iniciada, pero al parecer los priistas muy pronto se cansaron y ya se tomaron un día libre. Esto cuando Lerdo atraviesa una de sus peores crisis económicas, heredada de la Administración panista, que ha repercutido en la eficiencia de los servicios primarios como la recolección de basura, pero: a ¿quién le importa las molestias que se generen en la ciudadanía? Una vez ganadas las elecciones las huestes de Aguilera, mejor optaron por tomarse un día de descanso. En Madero, el alcalde Nicolás Muñiz Domínguez, reconoció que él dio permiso para que los trabajadores se tomaran el día, porque le expusieron razones de gran peso como el “que no querían ir a trabajar”. Bendita clase política, que sólo acude a sus oficinas los días de pago de la sagrada nómina.
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Nuestros subagentes vestidos de usuarios de los camiones verdes y rojos de Gómez Palacio, nos informan que en buen aprieto está metido el titular de Autotransporte Municipal de Torreón, Ernesto Cuéllar Galindo, ya que el cambio de rutas que realizó hace casi un mes, ha logrado un importante resultado, la unificación de usuarios, concesionarios y comerciantes de la Alianza y la zona Centro, pero en su contra. Y es que al explosivo funcionario público se le pasó un pequeño “detallito”: realizar un estudio de transporte integral de todas las rutas que utilizan la calle Múzquiz, pero se abocó únicamente a los camiones rojos y verdes y se fue contra ellos. Nuestros subagentes se preguntan: ¿qué no se supone que llevan mano las rutas más antiguas, las que tienen más afluencia o sea que son más necesarias y así en orden descendente? Supuestamente existe un estudio realizado por el Comité Técnico, pero el mismo hasta ahora no se ha mostrado. La Comisión del Transporte ya le pidió cuentas al respecto, pero Cuéllar ni los ve, ni los oye.
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Cada vez son más insistentes los rumores de que el estado caótico del alumbrado público en Torreón, de que esté apagado de noche y prendido de día, así como el considerable robo de cable es resultado de acciones de sabotaje de empleados sindicalizados, dicen las malas lenguas que “apoyados” por uno de sus jefes directos que está en contra del titular de Servicios Primarios, Carlos Gregorio Ramírez Hernández, a quien tienen en capilla desde hace un buen rato, dizque porque no da el ancho. Las instrucciones del director, los empleados las ignoran olímpicamente y es más el tiempo que se gasta por teléfono diciéndoles dónde hay fallas. Dicen los bien enterados que la estrategia está de dejar mal parado a Don Gregorio viene de más arriba del súper-regidor Manuel Villegas, porque quiere dejar a Don Baltasar García Villa en la dirección y meter a unos cuantos destacados operadores en ese departamento, así como lo hizo en Desarrollo Social y en Simas, considerados los cotos del poder del mal peinado Villegas y si alguien no lo cree, baste ver lo inflado de las nóminas, pero más aún, los que cobran por recibos.
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