El lunes, Coahuila retrocedió en el tiempo un par de décadas en el Segundo Informe del gober Humberto Moreira. Como si el avance democrático nunca hubiera sucedido, en ese estado el insulto y la descalificación siguen siendo la forma de hacer política. Don Humberto le anduvo picando la cresta al PAN en los días previos al Informe, con eso de que si le daban lata iba a exponer quién sabe que componendas oscuras. Los blanquiazules cayeron en la provocación: no se aguantaron la tentación de arruinarle el ritual del “Día del Gobernador” con pancartas que sacaron en la tribuna del Congreso allá en la peronera capital. Nuestros subagentes comentan que los panistas en realidad estaban enchilados con las amenazas del gober, que habían salido de la nada y como el coraje impide pensar claro, un día antes decidieron que iban a ponerse justo donde los quería el gober. A lo mejor andaban desmañanados porque tuvieron que irse al Congreso antes de las siete de la mañana, pues don Humberto se amachó en que iba a entregar el Informe a las ocho y media para cumplir el trámite e irse a los actos con la gente que sí lo quiere. Los nueve diputados del PAN le soltaron un rosario de agravios que no le falta razón: protagónico, autoritario, poco transparente, irrespetuoso de la autonomía legislativa o municipal fueron algunos de los sambenitos que le colgaron al gober antes de abandonar el salón de sesiones, como si fueran alumnos aventajados del PRD en tiempos de Carlos Salinas, porque ni siquiera los del PRD llegaron a salirse de un Informe.
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Como era de esperarse, el gober y la maquinaria tricolor se dejaron ir contra los panistas y se les pasó la mano. Golpeadores a sueldo sacaron pancartas señalando al líder de los diputados del PAN, José Antonio Jacinto Pacheco como homosexual y al senador y “primer compadre”, Guillermo Anaya, de corrupto y pariente de narcos. Don Humberto contribuyó poco a mejorar las cosas cuando retomó este último epíteto y acusó a panistas, sin dar nombres, de estar emparentados con narcotraficantes, en referencia a don Memo, a quien ya le han colgado en dos ocasiones nexos sin comprobar con un capo. El gober también llamó “niñas” a los blanquiazules con el asunto de que quisieron negociar las cuentas de un ex alcalde, de nuevo sin dar nombres, aunque nuestros subagentes dicen que todos los ojos voltearon para don Memo y al secretario general del PAN, Mario Dávila que fue alcalde de Frontera. El gober ha de pensar que tiene todo el respaldo, al mostrar una encuesta de la firma Covarrubias que según esto lo pone como el gobernador mejor calificado del país, pero nuestros subagentes recuerdan que ésa es la misma firma que le encuestaba al “Peje” López Obrador el año pasado y nunca salió a desmentirlo cuando decía que los sondeos le daban diez puntos de ventaja. Total, en un circo de tres pistas terminó el Informe, el cual dejó ver a un gobernador incapaz de negociar y tender la mano a los acuerdos y a una fracción panista sin imaginación para salir de su marginación política cuando actualmente el PAN es la primera fuerza partidista del país. Obviamente, el que sale perdiendo en todo esto es el ciudadano coahuilense que más motivos tiene ahora para desentenderse por completo de la cosa pública, si ésta se maneja como chisme de lavadero o arena de lucha libre. Porque es de esperar que nadie va a discutir ahora cómo ha avanzado o retrocedido Coahuila, cómo está su posición para atraer inversiones, construir infraestructura, educar y solucionar problemas sociales, cuando la clase política, del gober para abajo, lo único que puede producir son tristes espectáculos. Pero el gober se toma la vida tan relajada que ayer después de armar tremenda bronca, tomó un avión y se fue Washington. Ninguno de nuestros subagentes nos pudo informar el motivo de su viaje, aunque los malpensados aseguran que fue a felicitar a su amigo Al Gore después de que ganara el Nobel de la Paz, de ser cierto, vaya paradoja.
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Finalmente, el alcalde José Ángel Pérez, luego de pensarla, sí asistió al Informe del gober Moreira. Sobre Torreón, el gober tiró algunas cuentas alegres sobre inversión en infraestructura y desarrollo social. Claro que el gober no informó que los rubros antes mencionados fueron sujetos de controversia durante buena parte del año y que las obras de infraestructura que tanto ha publicitado se han concretado a cuentagotas, mientras la vicegubernatura de Desarrollo Regional se dedica a repartir tinacos y despensas, con los consiguientes corajes que eso le provoca a don José Ángel, quien ha de estar pensando que él tampoco tendrá grandes cosas que presumir en su Informe dentro de un par de meses. Por cierto, no extrañó para nada que el alcalde torreonense fuera el único ausente en el desplegado que los ediles del Estado le dedicaron a gober agradeciéndole que fuera tan buena persona, el motivo: don José Ángel publicó un desplegado el solito compartiendo firmas con el vicealcalde, Rodolfo Walls. Incluso hasta le agregó la frase de: Juntos logramos más… qué lejos se ven ahora los días de la famosa controversia constitucional.
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El diputado panista de Lerdo, Juan de Dios Castro Muñoz, agarró una nueva chamba como integrante de la comisión legislativa que se pondrá a investigar de dónde salieron las Hummers del ex preciso derrocado Vicente Fox. La comisión se formó a raíz de las fotos publicadas en una revista de sociales que lo muestran en toda la miel del romance con doña Marta Sahagún en medio de su rancho de Guanajuato. Por supuesto que ser mandilón no es delito, pero a los diputados les interesa saber de dónde sacó don Vicente la propiedad, la casota y los carros. Los ciudadanos de Boca del Río, Veracruz, esperan con ansias que la comisión termine su chamba porque ya dijeron que hasta entonces van a reponer la estatua de don Vicente que turbas malagradecidas tumbaron el fin de semana. El diputado Castro, se recordará, es el heredero de la dinastía política de los Castro Lozano que actualmente cobra en la nómina federal. De modo que algo sabrá de cómo le va a uno cuando sale del poder y deja cuentas pendientes, como le está pasando ahora a su tía Rosario con las cuentas de la Administración municipal de Lerdo. Aunque ahora eso parece más humo que fuego, pues el alcalde priista Carlos Aguilera le ha bajado al tono luego de que según esto se iba a ir duro contra los que lo dejaron sin dinero y hasta ahora no ha pasado nada.
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En los terrenos del PRI torreonense las cosas han andado movidas con la creación del Instituto Político Empresarial para darle cabida a empresarios jóvenes antes de que sucumban a las mieles del panismo. Todo es parte de la estrategia del hermano cómodo y jefazo del PRI, Rubén Moreira, para amarrar la victoria en las elecciones de diputados locales el año que entra. Pero el nuevo IPE arrancó la carrera ya medio bofo, pues el lanzamiento de la mesa directiva se dio de manera callada, como si a los neopriistas les diera comezón admitir que están en el tricolor. Luego procedieron a soltar en columnas el nombre del empresario del gas Nessim Issa como candidato del PRI a presidente municipal, al parecer sin preguntarle, pues nuestros subagentes comentan que don Nessim andaba fuera de la ciudad y sin la menor idea de que su nombre andaba circulando. También se habló de Carlos Bustos, dirigente del Grupo Empresarial Lagunero (GEL). Pero el objetivo de don Rubén es hacer amarres lo más pronto posible o en palabras de uno de sus allegados, “esta es una guerra y ya pegamos primero”. Todavía hay que ver la sustancia que tiene este nuevo instituto, donde también participa el diputado local Antonio Juan Marcos, que quizá lo ve como un instrumento para colarse en la carrera por la alcaldía, aunque es obvio que don Rubén (y su hermano el gober) lo pondrán al servicio del que quieran.
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