Nada más armó su borlote sobre los “panistas narcos y corruptos” y el gober Humberto Moreira tomó el avión para viajar a Washington. Detrás dejó un desorden, con el senador y “primer compadre” defendiéndose de la golpiza que le habían propinado sus propios correligionarios. Luego brincó el Senado, que se aventó una condena de las declaraciones aventuradas de don Humberto, quien en esos momentos se paseaba por la capital gabacha. El golpe del gober tendrá su efecto interno al atizar a las huestes tricolores en su batalla por la dominación intergaláctica (y también del Estado) pero allá en el DeEfe las acusaciones de don Humberto sonaron algo huecas. Dicen nuestros subagentes disfrazados de ardillas en Los Pinos, que el presidente Felipe Calderón ni respingó ante los señalamientos, porque ya le tomó la medida al gober y ya no se sorprendió de lo que andaba diciendo sobre su compadre. Eso sí, por ahí cuentan que el secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, le echó un telefonazo a los dirigentes del PAN coahuilense para pedirles que le bajaran. En el PRI nacional tampoco andan muy contentos con el gober, pues venía arrastrando ya su rechazo a las reformas fiscal y electoral que dejaron ver al tricolor como que no tenían todas las canicas en la bolsa, pues luego de negociar las reformas, un gobernador les salió respondón. Luego, la misma revista que el gober citó para sustentar sus dichos la agarró contra él. Así que los bonos de don Humberto no andan muy bien cotizados. Mientras tanto, subagentes en Cuatrociénegas reportaron un encuentro entre don Memo y el ex gober Enrique Martínez en un evento turístico-deportivo y es seguro que don Humberto haya salido a la plática en más de una ocasión, aunque como la Zarzamora: “de aquello que hablaron ninguno ha sabido...”.
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Pero decíamos que mientras en México el gober dejó un hervidero, éste andaba paseando por Washington, a donde se llevó el esmoquin para ir a recibir un premio en la cena de gala del “Washington Center”, un centro educativo de la capital, pero no como lo hicieron ver los publicistas de don Humberto, la ONG más grande de Estados Unidos. Resulta que el “Gobierno de la gente” tiene un convenio con el centro para enviar a jóvenes a recibir cursos en administración pública. Pero nuestros subagentes en las riberas del Potomac nos reportan que el “Washington Center” tiene nexos cercanos con el sindicato de maestros y más específicamente, con la famosa maestra Elba Esther Gordillo, cuatacha y protectora de don Humberto. El sindicato y el centro tienen relación antigua y el gremio magisterial regularmente envía a leales miembros como becarios para que pasen una temporada en Washington y la maestra asiste regularmente a los eventos del centro que, por cierto, es el mismo que hace varios años estableció la beca “Carlos Salinas de Gortari”.
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¡Cuatro vicealcaldes! Es el cartel que ofrece ahora la Presidencia Municipal de José Ángel Pérez con la llegada de Alfonso Tafoya como asesor para la parte “política” al tenor de sesenta mil pesillos al mes de honorarios. Don Alfonso se une a Rodolfo Walss, Jorge Hernández y Ricardo Muñiz como el nuevo dedo de la mano derecha de don José Ángel, que espera que su nuevo asesor le funcione y no lo meta en broncas. Don Alfonso es viejo conocido de esta columna, habiendo cobrado como secretario del Ayuntamiento en la gestión de Guillermo Anaya. Su arribo a la Administración del rival del senador y “primer compadre” es indicador del amarre que tiene don José Ángel en el PAN torreonense (y próximamente en el de Matamoros, con eso de que ya anda arreglando escuelas allá). Todavía no queda claro qué es lo que va a hacer exactamente el nuevo asesor para desquitar los sesenta mil pesillos asignados como sueldo, aunque buena parte de su chamba “política” sería encaminar la campaña de don José Ángel a la gubernatura mientras cobra cómodamente en la nómina municipal. En ese caso, probablemente no le pasará lo mismo que al vicealcalde Ricardo Muñiz, que lleva un año cobrando y todavía no sabe en realidad qué hace, ni tiene nombramiento formal de parte del Cabildo para coordinar el área “técnica” que sigue bastante descoordinada.
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Parece ser que don José Ángel puso muy de moda el asunto de la autonomía municipal con su controversia contra la vicegubernatura, tanto que ahora el alcalde de Matamoros, Raúl Onofre, se contagió del argumento precisamente para reclamarle al edil torreonense que anduviera arreglando escuelas en Matamoros y la agarró contra su colega. El problema para don Raúl es que hay un oficio que dice que desde el año pasado él mismo pidió a Torreón que le echara una manita a la escuela, donde el setenta por ciento de los alumnos son torreonenses y hasta prometió que se iba a poner con cien mil pesillos, que nunca llegaron. Él dice que el oficio es falso, inaugurando una guerrita de dimes y diretes. Claro que la realidad nunca es obstáculo cuando se trata de golpes políticos, pues también existe una carta del director de la escuela pidiéndole ayuda a don José Ángel. Pero nuestros subagentes en Matamoros reportan que don Raúl fue debidamente “cilindreado” por el “big brother” y jefazo del tricolor, Rubén Moreira, para que no se dejara y saliera a darle con todo a don José Ángel. Don Raúl se la tomó tan en serio, que hasta amenazó a don José Ángel con ponerle ¡una controversia constitucional! igualita a la que Torreón le armó al gober Moreira, historia de sobra conocida. Lo chistoso fue que don José Ángel se disculpó y argumentó que (como suele sucederle con frecuencia) sus funcionarios lo habían malinformado, pero insistió en que estuvo bien hacer la obra, no sin antes soltarle un regaño a varios subalternos por el desorden que armaron. Todo el numerito es algo absurdo, pero también una buena muestra de cómo anda la fraternidad lagunera.
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Allá en Gómez Palacio, nuestros subagentes reportan una que otra bronquilla entre los nuevos equipos de comunicación de Gómez y Lerdo y el que trae el gober Ismael Hernández Deras. La cuestión, comentan las malas lenguas, es que el nuevo equipo de comunicación del Ayuntamiento de Gómez Palacio, de Xóchitl Maldonado, intenta convertirse en una sala de prensa conurbada, agarrando la agenda de medios no sólo en eventos del alcalde Ricardo Rebollo, sino también en Lerdo o en los organizados por el Estado. En más de una ocasión, la oficina de Xóchitl Maldonado, vocera de don Ricardo, ha enviado comunicados presumiendo obras de otros, como aquella vez que desde sus oficinas en Gómez se anunció la sede de la Academia Regional de Policía que es una iniciativa estatal y quedaría en Lerdo, o aquella otra en la que presumió la Primera Feria del Empleo de la Administración de don Ricardo, cuando ésta fue organizada por el Gobierno del Estado. Obviamente cuando pasan estas cosas no se fijan bien en otros detalles, como cuando dijeron que había iniciado el proceso de construcción del puente del Miguel Alemán, cuando lo único que habían hecho fue sacar la licitación de las vías alternas. Y eso de andar haciendo caravana con sombrero ajeno, eventualmente va a desatar problemas con los dueños de los sombreros.
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