Un sobreviviente de una de las matanzas de las que se acusa al ex presidente Alberto Fujimori dijo hoy que recibió promesas de apoyo económico y también amenazas para que mantuviera silencio.
En la octava audiencia pública del juicio a Fujimori, dos sobrevivientes, que representan a los agraviados, brindaron sus testimonios sobre la matanza de Barrios Altos en 1991, en que 15 personas murieron acribilladas por un escuadrón militar de la muerte.
Tomás Livias, de 46 años hizo un desgarrador relato de cómo fue acribillado por la espalda la noche del 3 de noviembre de 1991, cuando unos cinco encapuchados ingresaron a una fiesta en un solar del distrito de Barrios Altos y abrieron fuego contra los presentes a los que consideraban terroristas.
Livias dijo que recibió 27 balazos por la espalda, lo que lo dejó parapléjico y aún con una bala alojada en la columna vertebral.
Fujimori es procesado desde el 10 de diciembre por delitos de homicidio, secuestro y lesiones graves, por la matanza de Barrios Altos y por el secuestro y asesinato de nueve estudiantes y un profesor de la Universidad La Cantuta de Lima.
Livias dijo que cuando estaba hospitalizado recibió la visita de dos personas, quienes "me dijeron, no hables contra el señor presidente Fujimori, él te va a apoyar, en las operaciones, en todas tus necesidades".
Relató que posteriormente recibió "todo el tiempo" amenazas de muerte contra él y su familia, y que su vida fue "un calvario".
Alfonso Rodas, el segundo sobreviviente en dar su testimonio, dijo que luego de los hechos sufrió constante acoso policial y que fue acusado de terrorista por lo que pasó 13 meses en prisión. Indicó que luego un tribunal militar lo absolvió al no encontrar pruebas en su contra.
Fujimori, quien gobernó entre 1990 y 2000, ha reconocido que hubo "excesos" de parte de las fuerzas armadas pero señala que fueron hechos aislados.
Sostiene que nunca ordenó aniquilamientos ni desapariciones de personas y que sus directivas eran respetar los derechos humanos.
El ex presidente, de 69 años, reiteró el viernes su defensa de la política antisubversiva que implementó su gobierno, afirmando que él salvó al país.
"Era el caos total, la inviabilidad del Perú, por eso yo digo en voz alta: yo salvé al Perú", declaró.
La fiscalía afirma que Fujimori conoció y permitió las actividades de un escuadrón de la muerte, denominado Colina, que tuvo como objetivo eliminar a sospechosos de terrorismo.
