Varios de los comentarios hechos por la prensa financiera especializada extranjera con motivo de la última visita de Felipe Calderón en Europa.
Revisando el crecimiento de la economía Mexicana en los últimos periodos presidenciales se puede concluir sobre un mediocre desempeño del PIB en los últimos 12 años.
Bajo el periodo de seis años de Ernesto Zedillo la economía creció apenas un tres por ciento y bajo el sexenio de Vicente Fox tan sólo el 2.5 por ciento. Este promedio constituye menos de la mitad del promedio de crecimiento que tuvo la región en los últimos tres años, y muy por debajo del crecimiento que México tuvo entre los años 1940 a 1980.
Los índices de pobreza, inmigración y desempleo por tanto no han dejado de crecer.
Pragmáticamente y sin hacer juicios se puede concluir que bajo el sexenio de Carlos Salinas la economía mexicana aceleró su apertura comercial, bajo el periodo de Ernesto Zedillo se dieron los primeros pasos para la creación de una democracia legítima, y en el periodo de Vicente Fox se dio por culminado un periodo de 70 años de una dictadura partidista del PRI.
Sin embargo, el viejo corporativismo que existe en México desde 1930 sigue intacto y más fuerte que nunca. Los grandes monopolios están prácticamente en cada espacio de la vida de todos los mexicanos.
Televisa y TV Azteca dominan prácticamente toda la televisión, Telmex indiscutiblemente es quien controla la telefonía fija y móvil, Cemex es el proveedor de Cemento y recientemente distribuidor de material de construcción más poderoso de México, entre Citi-Banamex y BBV-Bancomer controlan el 80 por ciento de todos los depósitos en México, Bimbo y Maseca controlan y dominan el mercado de Pan y Tortilla, y Walmart ?el mayor empleador de México- ha desplazado a los tradicionales supermercados minoristas y a otras cadenas de menor tamaño.
Y eso no es todo.
El sindicato más grande de toda Latinoamérica y uno de los más grandes y poderosos del mundo ?el sindicato de maestros, con 1.2 millones de miembros- es quien decide prácticamente los destinos de la educación pública en México. Pemex y la CFE son los únicos proveedores de combustible y electricidad.
El Instituto Mexicano del Seguro Social es proveedor del 50 por ciento de todos los servicios de salud que se otorga en México.
Visto fríamente: El poder que acumulan estos monopolios es incuestionable, constituye una auténtica muralla no sólo para los inversionistas extranjeros sino para los mismos emprendedores mexicanos, a pesar de los esfuerzos de la Comisión Federal de Competencia.
La competencia justa y libre, y el respeto a una correcta legislación es indispensable para el desarrollo de talento y la creación de riqueza en una economía.
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