BANDERAZO DE SALIDA.- Romance: Juego de caza donde el atrapado tiene que comprar licencia. * En el Metropolitan Opera House de Nueva York colocan, en el respaldo de los asientos, un dispositivo computarizado para que el público pueda leer en inglés el libreto de las óperas que se representan en francés, alemán o italiano. Se ha descubierto que muchos diletantes de la ópera no comprenden ni jota de lo que se canta en idiomas extranjeros, aunque si saben la trama de la obra, y que por lo mismo no entienden todo lo que se dice en el escenario. * Charlie Chaplin tenía 54 años de edad cuando se casó con Oona O´Neil, de sólo 18. Por esta diferencia de edades, el papá de Oona, el famoso dramaturgo Eugenio O´Neil, se opuso terminantemente a la boda. Pero la pareja fue feliz, tuvieron ocho hijos, y el matrimonio duró hasta la muerte de Chaplin.
CURVA PELIGROSA.- Política: el arte de agitar al pueblo antes de usarlo en beneficio propio. * Contra lo que se cree, reciente encuesta entre jóvenes casaderas de buen ver arrojó que el 55 por ciento de las mismas dijeron que no firmarían un contrato prematrimonial con un hombre rico, aunque les costara el matrimonio. * Para recordar: Los clásicos zapatos mocasines norteamericanos que tienen una ranura al frente, donde las “teenagers” (adolescentes de 13 a 19 años de edad) colocaban una moneda de un centavo (penny), por lo que se les llamaba popularmente “penny loafers” (mocasines con moneda), fueron creados en 1930 por la empresa G.H. Bass & Co. Y el nuevo modelo venía solo en cuero negro o café, y se llamaba “The Weejun”. Fue en los años 40, en la llamada era del swing, cuando los jóvenes comenzaron a colocarles la moneda, lo que les cambió el nombre, y los convirtió en uno de los zapatos más conocidos e imitados del mundo. Hoy siguen vendiéndose a un precio moderado de 65 dólares.
RECTA FINAL.- En un libro de anécdotas que divierte actualmente a los ingleses, se cuenta que aunque era muy pequeña la princesa Isabel, hoy reina Isabel II, quería que todos la trataran con respeto y ceremonias. El mayordomo J. Jenkins, uno de los más antiguos servidores del Palacio de Buckingham saludó a la pequeña diciéndole: “Buenos días, joven damita”, a lo que Isabel, indignada, respondió: “No me llame así, pues no soy una dama sino la princesa Isabel”. Cuando se enteró del hecho la Reina María, abuela de la niña, la llevó ante Jenkins y le dijo: “Aquí tiene usted, mi amable señor Jenkins, a la princesa Isabel, quien espero que algún día sepa comportarse como una dama”. * En Puerto Rico deleitan a los turistas con el cóctel llamado “Piña en las Montañas” que se prepara en la batidora con helado de vainilla, ron blanco, crema de coco y jugo de piña. Se adorna, por supuesto, con un trozo de la fruta que le da su nombre.
META.- Como están las cosas, se dice que los únicos que ahora escalan por sus propios méritos y esfuerzos son los alpinistas. * Si usted quiere vivir como los grandes, prepárese a hacer entre otros los siguientes gastos: comprarse un Rolls Royce “Silver Spur” de 186 mil dólares; viajar de negocios Nueva York-París en primera clase, en Air Franje o British Airway; disfrutar de una botella de champaña Dom Perignon de 750 mililitros por 140 dólares; un frasco de 30 gramos de caviar Beluga de 80 dólares, y terminar con una caja de una libra de chocolates Teusha con truffles de 50 dólares. * ¿Por qué será?, pero cuando fallece un anciano parece que está envuelto en pergaminos.
