El mexicano realizó el cortometraje “8”. (AP)
Gael García Bernal, quien presentó como director un corto en el Festival de Cine de Roma, reconoció que le tiene un “cariño muy especial” al personaje de “Julio” que interpretó en la película Y tu Mamá También y consideró que irse a Hollywood sería una decisión equivocada.
García Bernal, quien reside en México, reconoció que trasladarse a la Meca del Cine “sería la peor decisión económica que podría tomar, porque yo gano en pesos”.
En entrevista García Bernal señaló que antes que nada es un actor, lo que le permitió entrar con el pie derecho a su faceta de director y con la que ahora puede participar en la película colectiva “8” (Eight/Huit), al lado de cineastas como Wim Wenders, Gus Van Sant y Jane Campion.
Desde la terraza de un hotel localizado en el corazón de la “Ciudad Eterna”, el mexicano habló también de los privilegios de su profesión que le permiten ser un flojo “sin culpa” en momentos como el actual, en los que no está trabajando en ningún proyecto, pero que puede recargarse de energía.
“Para un actor esto de no hacer nada es cuando más haces, pues hay ciertas películas que te obligan a concentrarte en un tema, te vuelves monotemático, te vuelves bastante pesado porque estás concentrado en una sola cosa, te lo tomas muy a pecho, te lo tomas tan en serio que de cierta manera afecta tu día a día”, acotó.
Por eso, dijo que cuando llega el momento en que no se tiene una tarea “es cuando de plano vuelves de alguna manera a respirar, a contemplar, a observar y a cargar energía. Es cuando más cosas hago, cuando más voy al cine, al teatro, cuando más hago ejercicio, más veo a mis amigos o planeo cosas”.
El actor reconoció que extraña mucho al personaje de “Julio” que interpretó en Y tu Mamá También. “Me pregunto qué será de él ahora. A esos personajes les tengo mucho cariño, se volvieron muy vivos, al grado que seguimos siendo los charolastras. Nos dieron una identidad, aunque la verdad no somos como ellos, pero compartimos un mismo cuerpo, una misma voz, una misma mirada, entonces esos personajes son como nuestro patrimonio”.
Mencionó que como actor “uno va descubriendo su propio camino” y “absorbiendo de manera arbitraria y de diferentes personas, a veces consciente y otras inconscientemente.
“Puedo decir nombres de personas que me gusta cómo han hecho su trabajo, que han llevado un camino interesante para sus posibilidades, por ejemplo, Daniel Day-Lewis es una persona al que le viene bien lo que ha hecho, uno no podría hacer eso, uno no es inglés para hacer esos personajes”, apuntó.
“Lo mismo Javier Bardem, por ejemplo, pero uno no es español, es otro mundo, es otro acercamiento completamente diferente que el de donde yo vengo; cada quien se la ha fraguado de manera distinta y así siempre va a ser”, anotó.
En torno a su inminente debut como padre, García Bernal también dijo que será “algo trascedental”, como lo es para todos aquellos que tienen un hijo.
Se luce como director
Sobre su faceta como director, bajo la cual ha rodado los cortos Déficit y The Letter (incluido en el filme “8”), dijo que le ha permitido aprender que no se debe actuar en la misma película que se dirige.
“Hay gente que lo puede hacer y lo maneja muy bien, como Charles Chaplin, quien era increíble o como Woody Allen, pero depende, es un ejercicio interesante; como actor aprendes muchísimo, como director también y la verdad el hecho de ser actor hace que uno empiece con el pie derecho como director”, consideró.
En “8”, un proyecto nacido a raíz del compromiso asumido en 2000 por la ONU, que estableció ocho objetivos para mejorar la vida de la población mundial y en especial reducir la pobreza, a García Bernal se le asignó la tarea de rodar el corto relativo al segundo de tales objetivos: extender la educación primaria universal.
De ahí nació The Letter, realizado entre febrero y marzo de este año en Islandia (donde el mexicano participaba en la obra teatral Together) y en el que se reflexiona sobre la educación como medio para alcanzar la libertad, a través de una carta de un joven a su padre.
“Yo estaba haciendo una obra de teatro en Islandia, y no podía hacer la película fuera ahí, porque tenía restricciones de tiempo. La única manera en la que podía filmarla, para lo que tenía mes y medio, era donde me encontraba en ese momento, en Islandia”, informó.
Ve buen momento latino
Consideró que el cine mexicano y el latinoamericano en general pasan por un buen momento, entre muchas otras razones porque países como México, Argentina o Brasil “son lugares que han sido poco retratados” y en los que hay “mil historias que contar.
“Ciudades como Buenos Aires, Sao Paulo o Ciudad de México son catalizadores de emociones: uno puede salir a la calle y pasar en 10 segundos de la felicidad a la tristeza; pasan millones de cosas frente a ti y en cada esquina hay una historia que contar”, anotó.
Además, opinó, ha habido un resurgimiento de la creatividad, pues “en tiempos de crisis es cuando más ha aflorado el cine latinoamericano.
“Ahora el cine mexicano tiene más que ver con el cine iraní, el cine coreano, el cine francés o el de Estados Unidos, que con el cine mexicano en sí, pues poco tiene que ver con las viejas historias del Indio Fernández o de las películas de Pedro Infante”, señaló.
Y en relación al trabajo de Guillermo Arriaga o Alejandro González Iñárritu, solamente respondió: “Uno es escritor y el otro director”.