Laker de los Ángeles y Celtics de Boston se enfrentarán esta noche en el tercer partido de la serie final, en la que los de Boston tienen ventaja de 2-0. (AP)
El hambre de triunfo después de una larga espera de 22 años sin poder conseguir el título de la NBA, tiene ahora a los Celtics de Boston muy cerca de la corona al encontrarse arriba en la serie final 2-0 sobre Lakers de Los Ángeles.
Guiados por el indomable Kevin Garnett, Celtics están a dos juegos de levantar por decimoséptima ocasión en su historia el trofeo “Larry O’Brien”, algo que el “chico malo” de Boston nunca ha podido hacer en su brillante carrera como basquetbolista profesional.
Este impulso de verse campeón parece ser el que tiene a los Celtics desatados. Han pasado 13 años desde que Garnett llegó a la NBA con los Minnesota Timberwolves, equipo al que sacó del anonimato para convertirlo en una franquicia ganadora.
Conoce las historias de leyendas como Karl Malone y John Stockton, quienes tuvieron que retirarse con el amargo sabor de la derrota y sin poder saborear un título de la NBA, su oportunidad está cerca y no desaprovechará el momento con Boston, pues pudiera ser el último.
El famoso número cinco de los Celtics nuevamente fue un factor para que Boston sacara el segundo triunfo de su quinteta en la serie final al ser el líder del equipo en rebotes con 14, además de sumar 17 puntos en 39 minutos en la duela.
El coach Phill Jackson no encuentra la fórmula para contener este agresivo juego de Boston, quien además contó con un inspirado Paul Pierce, que a pesar de no estar al 100 por ciento fue líder del equipo en la victoria del domingo con 28 puntos.
La ofensiva de los Lakers simplemente no responde, Lamar Odom sigue sin aparecer en esta serie final y Kobe Bryant no puede solo con el enorme paquete de enfrentar a un equipo que está sediento de victoria.
Hoy martes la serie continúa en Los Ángeles y el Stapless Center será el escenario que albergue los siguientes tres juegos, por lo que ha llegado el momento de que los californianos respondan si no quieren sufrir una humillación como la que recibieron en el 2004 cuando fueron derrotados 4-1 por los Pistones de Detroit.
No se ve cómo los Lakers puedan frenar a Garnett, pues hasta el momento su banca tampoco responde, pero quizá el apoyo de su afición levante el ánimo de un equipo que nunca en estos playoffs se vio abajo en las series que disputó. Esta es una situación nueva para los angelinos, quienes deberán demostrar aplomo para poder revertir la situación, si es que tienen hambre de triunfo.
Hace cuatro años todo mundo daba como favoritos a los Lakers, y parecía que Karl Malone y Gary Payton podrían retirarse como campeones, pero no fue así, los Pistones de Detroit con un juego agresivo similar al de los Celtics borraron de la duela a los de púrpura y amarillo.
