El mexicano Alejandro Domínguez, quien purgó injustamente cuatro años y nueve meses de cárcel, está a punto de ganar una batalla legal a la ciudad de Waukegan, Illinois, que deberá indemnizarlo con nueve millones de dólares.
Tras un largo proceso, la juez de la séptima Corte de circuito, Diane P. Wood, ratificó este jueves el fallo en favor del joven que fue acusado de violación sin ser el responsable y debió cumplir la condena.
“Me siento contento porque después de esperar tanto tal parece que la justicia está por cumplirse, pero si la ciudad apela, el caso podría aplazarse un año más”, declaró Domínguez en entrevista.
La ciudad cuenta con 30 días para apelar el resultado, de acuerdo con el proceso.
El joven originario del Estado de México fue acusado de invasión de domicilio y asalto sexual en contra de la anglosajona de 18 años, Lisa Kraus, quien vivía en el mismo edificio que él en septiembre de 1989, cuando Domínguez tenía 15 años.
El oficial de Policía, Paul Hendleg, señaló a Domínguez como culpable basado en un reporte del hospital naval donde Kraus dio una entrevista después del ataque sexual, la cual no coincidía con su declaración posterior, pero nunca fue presentada en Corte.
El mexicano fue encarcelado y pasaron cuatro años antes de que obtuviera su libertad, debido a que las pruebas del ADN aplicadas demostraron que él no era el responsable.
En 2004, el joven, que ahora es un activista pro inmigrante, interpuso la demanda en contra de Hendleg y la ciudad de Waukegan por detención incorrecta y privación de sus derechos constitucionales.
La demanda ya había sido ganada por Domínguez, pero la ciudad de Waukegan, de 90 mil habitantes, 60 por ciento de ellos hispanos, apeló el resultado.
Esta no es la primera vez que los inmigrantes hispanos de Waukegan, ubicada al Norte de Chicago, demandan a la ciudad por actos injustos, particularmente cometidos por la Policía local.
El 30 de mayo de 2007, la corte del Condado de Lake falló en favor de la familia de Wilson López, un hondureño indocumentado que murió en 2005 prensado en el interior de su auto por una patrulla.
La familia demandó a la ciudad de Waukegan y ganó 2.3 millones de dólares de indemnización. El alcalde Richard Hyde ha declarado que la ciudad gasta mucho en demandas.
