Grupos de estudiantes y dirigentes políticos, varios de ellos vestidos como reos de la cárcel de Guantánamo, protestaron ayer en Lima (Perú), en contra de la presencia del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, así como de la realización de la XVI Cumbre de Líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico 2008. (EFE)
Se comprometen a adoptar medidas urgentes y extraordinarias para estabilizar los sectores financieros.
Los líderes de economías del Asia-Pacífico, que controlan casi el 60% de la producción económica mundial, dijeron ayer que llegaron a sus primeros acuerdos para actuar “individual y colectivamente” a fin de restaurar la confianza en el sistema financiero global.
En el debate privado de la jornada inaugural se comprometieron a continuar adoptando las “urgentes y extraordinarias medidas” que han sido puestas en vigor en semanas recientes para estabilizar los sectores financieros, fortalecer el crecimiento económico y promover inversiones.
Parte de los detalles del llamado “primer retiro” de la cumbre de 21 economías del Foro para la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) fue dada a conocer en una declaración de los dirigentes, que hoy concluirán su cumbre, la XVI del foro creado en 1989.
Como se esperaba, los gobernantes dijeron que estaban en contra de la adopción de medidas proteccionistas y así endosarán la declaración emitida en Washington hace una semana por los gobernantes del G-20, la primera cumbre presidencial para tratar exclusivamente la crisis.
En la cumbre participan los gobernantes de Australia, Brunei, Canadá, Corea del Sur, Chile, China, Estados Unidos, Filipinas, Hong Kong, Indonesia, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Papua Nueva Guinea, Perú, Rusia, Singapur, Taiwán, Tailandia y Vietnam. Nueve son miembros del G-20, conformado por naciones ricas y las más ricas entre los pobres.
En Lima, los gobernantes dijeron que apoyaban “con toda decisión los principios comunes” del plan de acción de Washington para restaurar el crecimiento y estabilidad mediante el fortalecimiento de la cooperación macroeconómica, para evitar una extensión del contagio, apoyo a las economías emergentes y una amplia reforma de las instituciones financieras internacionales para dar más peso a las economías emergentes.
Indicaron que también apoyarán la conclusión “amplia y exitosa” de las negociaciones de la ronda Doha para un nuevo ordenamiento del comercio internacional de bienes agrícolas, industriales y servicios, así como la promoción de los objetivos iniciales del foro de mercados libres y abiertos y formación futura del área de libre comercio del Asia-Pacífico.
RECHAZAN PROTECCIONISMO
En discursos previos a la primera sesión de la cumbre varios gobernantes hicieron notar las dificultades del momento actual para sus economías y el futuro inmediato de las finanzas globales.
El presidente estadounidense George W. Bush, quien cederá funciones a Barack Obama el 20 de enero, había pedido que los líderes de las 21 economías presentes trabajasen en conjunto para resolver la crisis global con el rechazo a toda forma de proteccionismo.
“Una de las lecciones perdurables de la Gran Depresión (en Estados Unidos) es que el proteccionismo global es la senda a la ruina económica global”, afirmó.
El presidente de Corea del Sur, Lee Myung-Bak, quien habló antes de Bush, dijo que este es “un momento de crisis y requiere de medidas de crisis de todas las naciones”.
El primer ministro canadiense Stephen Harper coincidió en los comentarios sobre un trabajo coordinado de la comunidad mundial. Al comenzar su mensaje agradeció a quienes lo felicitaron por su reciente reelección, pero hizo notar que “una reelección en estos tiempos equivale a ganarse unas vacaciones en el Caribe en la temporada de huracanes”.
América Latina está mejor preparada para encarar la crisis
Los países de América Latina están mejor preparados que las naciones desarrolladas para enfrentar la crisis financiera global, pero deberán anticipar un periodo de recesión prolongado, dijo ayer José Ángel Gurría, secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
“Ningún país se va a librar del impacto de la recesión mundial. Los países de América Latina están mejor preparados para enfrentar el embate, pero no hay que menospreciar la magnitud del reto”, sostuvo en rueda de prensa el funcionario de la OCDE, con sede en París que agrupa a 30 países.
El funcionario señaló que la OCDE prevé un crecimiento negativo o recesión para los países desarrollados, al lado de los cuales, los países emergentes “están mejor”. La crisis mundial se desencadenó por una implosión del mercado inmobiliario de Estados Unidos, y rápidamente el efecto se contagió en Europa.
El mexicano Gurría señaló que los países latinoamericanos se encuentran en mejor posición que antaño para encarar la crisis puesto que ya no tienen los problemas pasados de fuerte deuda externa y desequilibrios fiscales marcados, sino que más bien han reducido el déficit promedio y observan disciplina en sus políticas monetarias.
No obstante, remarcó que deberán estar preparados para soportar un periodo de recesión que abarcará todo 2009 y parte de 2010.