El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, (izq.), y el jefe de la Junta Militar de Birmania (Myanmar), general Than Shwes, (der.), durante el encuentro mantenido en Bayint Naung YeikTha, Myanmar, hoy 23 de mayo. (EFE)
El jefe de la Junta Militar de Birmania (Myanmar), general Than Shwe, acordó hoy con el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, permitir la entrada de "todos los cooperantes" de las organizaciones humanitarias que pretenden ayudar a las 2.5 millones de damnificados por el ciclón.
Este acuerdo, sobre el que no ha transcendido el grado de libertad de movimiento que las autoridades concederán a los cooperantes y empleados de las agencias de la ONU, fue el resultado del encuentro que Ban sostuvo con el general Shwe en Naypidaw, bastión del régimen y nueva capital del país.
"Ha acordado permitir el acceso a todos los cooperantes cualquiera que sea su nacionalidad", declaró Ban a la prensa tras la reunión de casi dos horas de duración celebrada al día siguiente de su llegada a Birmania.
El devastador ciclón atravesó el delta del río Irrawaddy los días 2 y 3 de mayo y causó la muerte de 77 mil 738 personas y otras 55 mil 917 están desaparecidas.
Fuentes de la ONU indicaron a la prensa después del encuentro que el general Shwe dijo a Ban en relación a las restricciones de acceso a la región afectada, que "no había razón de que esto ocurriera siempre y cuando los trabajadores sean genuinos y se dediquen a la ayuda humanitaria y esté claro qué es lo que van hacer".
El "número uno" del régimen, que desde que se produjo la catástrofe no contestaba a las llamadas telefónicas que le hizo el secretario general de la ONU, se había negado antes de la reunión a permitir el pleno desembarco del personal de las organizaciones humanitarias.
Numerosas organizaciones habían ofrecido medios para prevenir la hambruna y las enfermedades en la región del delta del río Irrawaddy, arrasada por el ciclón.
La mayoría de los extranjeros, que unos días después del ciclón consiguieron alcanzar las aldeas destruidas, fueron expulsados de la zona por las fuerzas de seguridad, que establecieron a su vez puestos de control en todos los accesos.
Ban explicó en rueda de prensa que durante la reunión puso énfasis en que era de "importancia crucial" para el jefe de la Junta Militar "permitir la entrada de los trabajadores lo más rápido posible y que toda la ayuda también se distribuya entre la gente necesitada lo antes posible".
El acuerdo entre el general Shwe y Ban contempla también que el aeropuerto de Rangún, situado a las afueras de la ciudad, sea el que reciba los aviones con ayuda, así como el centro logístico y de las operaciones de distribución.