El ex canciller mexicano Jorge Castañeda denunció que existe un complot en su contra orquestado desde el Ejecutivo para impedirle ganar una demanda que abriría en México la posibilidad de contender en elecciones presidenciales a candidatos independientes.
"El gobierno federal de Felipe Calderón va con todo: quiere darme en la madre", afirmó Castañeda.
El político mexicano interpuso una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) contra el estado mexicano porque el Instituto Federal Electoral (IFE) del país le impidió inscribirse como candidato independiente en los comicios presidenciales de 2006, que le dieron la victoria a Calderón.
Además, la Suprema Corte de Justicia de México se negó a declararse sobre el fondo de su demanda en agosto de 2005, lo cual motivó que la CIDH aseverara que Castañeda sufrió una "denegación de justicia" y remitiera el caso a la Corte Interamericana.
Esta tarde la Corte Interamericana, desde su sede en San José de Costa Rica, decidirá si se declara o no competente para fallar en el caso.
Castañeda fue secretario (ministro) de Relaciones Exteriores entre los años 2000 y 2003, cuando presidió el país Vicente Fox (2000-2006), del Partido Acción Nacional (PAN), igual que Calderón.
"El Gobierno va con todo: quieren que la Corte (Suprema) se abstenga, que se declare en cero competencia para resolver el caso", argumentó Castañeda, de 54 años.
A su juicio, también es posible "que el Gobierno esté vendiéndole al Partido Revolucionario Institucional (PRI, en el poder en México a lo largo de 71 años, de 1929 a 2000) que este fallo no pasa a cambio de algunas reformas".
Para el político mexicano su lucha es "contra los anacronismos del Estado mexicano" y también contra "la partidocracia que gobierna el país y que acaba de hacer una reforma constitucional y electoral regresiva, en la cual le cierra aún más el paso a las candidaturas ciudadanas".
Advirtió también que si la Corte Interamericana falla a su favor, "esa decisión será vinculante para el Estado mexicano, ya que es signatario desde 1998 de la Convención Interamericana sobre Derechos Humanos", que en uno de sus artículos establece el derecho de todo ciudadano de votar y ser votado en elecciones.
Sin embargo, negó que su intención sea "pulverizar a los partidos".
En este sentido, consideró que se pueden crear mecanismos para evitar la inscripción de "diez mil" aspirantes para unas elecciones presidenciales (las próximas en México se celebrarán en 2012), como por ejemplo establecer un mínimo de firmas ciudadanas para inscribir una candidatura.
Se publicó en una información exclusiva que Castañeda fue reclutado por los servicios de inteligencia de Cuba en 1979 y proporcionó al Gobierno de Fidel Castro información estratégica durante más de tres años, lo que el político niega.
