En una acusación pública insólita por su contundencia y porque está avalada por las más representativas agrupaciones empresariales de Nuevo León, la delegación regiomontana de la Cámara Nacional de la Vivienda (Canadevi) calificó de corrupto al alcalde panista de Monterrey, Adalberto Madero. Éste desestimó la posición de los grupos patronales y la refirió a su condición de precandidato al Gobierno del estado, si bien se cuidó de sugerir que las organizaciones firmantes de la denuncia en su contra hicieran el juego a alguno de sus antagonistas.
No es la primera vez que la Administración municipal encabezada por Madero, y él mismo, han sido cuestionados por su deshonestidad. Cuando fue dirigente estatal de su partido, Rebeca Clouthier alertó a los panistas sobre el riesgo electoral que corren al no reaccionar sobre la corrupción reinante en el ayuntamiento, si bien la denuncia perdió fuerza al no ser validada, con acciones legales que están en posición de ejercer, por los regidores blanquiazules ni por los diputados locales de la misma filiación. Hace apenas dos meses, la agrupación Comprometidos por Nuevo León renovó los señalamientos sobre el alcalde.
Sin embargo, suscrita por organismos empresariales como la Canadevi misma, la Cámara de la Industria de la Transformación, la Coparmex, el Centro bancario, la Canaco de Monterrey, el Consejo Cívico de Instituciones de Nuevo León y la Cámara de Propietarios, la denuncia cobra fuerza y sentido singulares. Aseguran esos organismos que “no pueden seguir consintiendo con su silencio el grado intolerable de corrupción que se registra con particular cinismo en la actual Administración municipal de Monterrey encabezada por Adalberto Madero Quiroga”. Empleando el lenguaje de la preocupación ciudadana en boga, los firmantes consideran que “toda la actividad productiva de la ciudad está secuestrada y sujeta al pago de rescate por la extorsión en cada uno de sus trámites”. La Canadevi alude a las denuncias que en su seno presentan sus asociados, lo que la lleva a una conclusión presentada en su mensaje con vehemencia exclamatoria:
“!El daño económico y moral para la comunidad regiomontana es incalculable!”
Dice la Canadevi con el apoyo del resto de las agrupaciones que cuando se pregunta a los funcionarios municipales la razón de sus exigencias económicas para realizar trámites que están obligados a efectuar, “responden ‘que son órdenes de arriba’, y arriba sólo están el cabildo y el alcalde”. A su lamentable experiencia propia, alimentada por “inaceptables actos de corrupción”, dice la Canadevi que deben agregarse los publicados sobre parquímetros, tránsito, alcoholes y permisos para casinos que, en efecto, han menudeado desde que hace dos años empezó su trabajo el ayuntamiento.
Dicen los representantes empresariales estar “dispuestos a dar testimonio de las tentativas de extorsión que de que hemos sido objeto, para que el órgano de Gobierno que se considere competente aplique la ley en todo su rigor”. Y aunque proclaman que “esta situación debe corregirse de inmediato”, a la exposición pública de su protesta no siguió la formalización de la misma, que pudo haberse hecho ante el Congreso local, cuyas funciones de fiscalización sobre los ayuntamientos lo facultan para actuar en un caso así, o ante el Ministerio Público local, por el delito de extorsión en cada uno de los momentos cuya acumulación parece haber colmado su paciencia. Si no acuden a esos u otros órganos gubernamentales capaces de enfrentar legalmente la situación expuesta, su denuncia habrá quedado en los límites de la política, la hubiera suscitado o no cualquiera otro protagonista (en el PAN o en otro partido) de la escena política.
Madero Quiroga cumplirá 39 años dentro de diez días. Abogado por la Universidad regiomontana, ha escrito obras de carácter jurídico e histórico (es cronista del municipio de Allende) y otras cuyos títulos sugieren que son de autoayuda y superación personal: Camino a la vida, Naciste para triunfar, La razón de vivir. Además de muchas tareas en el seno de Acción Nacional en Nuevo León, fue diputado local entre 1997 y 2000 y de allí pasó a ser senador por mayoría. En la Legislatura local protagonizó un lance de sentido contrario al reproche que hoy se le asesta. Denunció un desfalco en el Gobierno interino de Benjamín Clariond Reyes Retana, que condujo a la persecución legal de su tesorero Xavier Doria, quien eludió la cárcel al devolver 170 millones de pesos.
Actualmente, además de su condición de alcalde cuestionado, es prematuro precandidato de su partido al Gobierno del estado, que se renovará en la elección general de julio próximo. Con ese carácter estuvo presente en la reunión encabezada por Germán Martínez, el jefe nacional panista, con quienes aspiran a la postulación que permita al PAN recuperar la gubernatura de Nuevo León. Además de Madero, participarán en el certamen interno de ese partido el senador Fernando Elizondo, el ex senador y alcalde de San Pedro Garza García, Fernando Margáin y el diputado local Fernando Larrazábal, que en su promoción personal violenta la prohibición constitucional reciente; y como director del Capfce (Comité Administrador del Programa Federal de Construcción de Escuelas) participó en la deplorable edificación de la magnabiblioteca José Vasconcelos.
Encuestas recientes sitúan en primer lugar entre los cuatro a Elizondo, que fue ya gobernador interino (y secretario de Energía) pero busca serlo por seis años.
