Adicciones en el trabajo, práctica en aumento
Aconsejan a centros de trabajo dar programas de prevención y aplicaciones sorpresa de antidoping.
El consumo de drogas en el medio laboral en México va en aumento, no sólo como práctica de experimentación, sino como uso constante, debido, entre otros factores, al incremento en la disponibilidad de algunos estupefacientes en diversas regiones del país, así como a cambios socioculturales importantes entre los que se encuentra el incremento en el número de jóvenes que comienzan a obtener ingresos, parte de los cuales emplean para comprar bebidas embriagantes o algún tipo de sustancia.
Organizaciones sindicales como la Confederación de Trabajadores de México (CTM), la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) y el Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF), aseveran que no sólo en los sectores de la gastronomía o relacionados con el espectáculo, los trabajadores tienen algún tipo de adicción, sino que ya se presenta en todos los sectores en donde los jóvenes son altamente vulnerables.
De acuerdo con el Consejo Nacional contra las Adicciones (Conadic), el uso de drogas ilícitas como la cocaína, ha aumentado y se empieza a generalizar en grupos que tradicionalmente no la usaban, como los jóvenes, quienes también registran un incremento en cuanto al consumo de las metanfetaminas.
El uso del crack también va creciendo, incluso entre periodistas y otros comunicadores, señala la doctora Dania de Martini, psicóloga del hospital Héctor Tovar del IMSS.
De ahí, señaló De Martín, que se deben aplicar en todos los centros de trabajo programas de prevención y aplicaciones sorpresa de antidoping, no sólo para inhibir el consumo, sino para detectar a personas con alguna adicción y proporcionarles tratamiento especializado.
Información de Centros de Integración Juvenil, resalta que donde se encuentran más fácilmente ubicados los y las que consumen drogas, es en el ámbito laboral, pues el 50% trabaja y el 20% estudia. Y se considera que muchos trabajan en la economía informal.
La población de menores trabajadores ha sido abordada por diversos estudios desde la década de 1970. Los elaborados en los últimos 20 años coinciden en señalar el elevado riesgo del uso de drogas entre los menores trabajadores, que se asocia con una exposición a factores que aumentan su vulnerabilidad tanto durante su infancia temprana como en su deambular por las calles.
De acuerdo con el Conadic, las regiones de mayor riesgo en el consumo de drogas en términos generales destacan la Noroccidental, con ciudades como Tijuana y Ciudad Juárez, y la Central con las ciudades de México y Guadalajara. Sin embargo, también en otros sitios ya comienzan a presentarse indicios preocupantes del uso de drogas como la cocaína y la heroína lo que reafirma la necesidad de intervenir en estas zonas de alto riesgo.
La CTM y la UNT, coinciden en que a pesar de que el problema de las adicciones en el mundo laboral representa un foco rojo, no existen servicios de salud especializados para atender a estos trabajadores, y aunque el alcoholismo y la drogadicción se reconocen como una enfermedad, en forma oficial no se toma como tal, y se desconocen los derechos de los enfermos productivos.
Por ello, sindicatos afiliados a estas centrales impulsan varias alternativas de prevención y atención para contrarrestar este problema, entre los que destacan proyectos de iniciativa de Ley de la CTM para que se reconozca como una enfermedad en los servicios de salud, así como buscar un trabajo conjunto con la parte patronal.
El secretario de Bienestar Social de la CTM, Fernando Salgado Delgado comentó que se han implementado redes de asesores sociales, con jóvenes que orientan sobre la prevención y atención de estas enfermedades.
Lo anterior, a través de un plan integral de prevención, detección y rehabilitación que pretende el bienestar de las personas en los ámbitos individual, familiar y laboral.
En este marco, la CTM y el Sindicato Único de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF), están por concretar, por separado, centros de rehabilitación para atender a sus agremiados.
En el caso del SUTGDF, su presidente Enrique Hanff Vázquez, informó que este año iniciará la construcción del primer centro de rehabilitación de adicciones, que podría instalarse en cualquiera de sus tres deportivos.
Por lo pronto, iniciarán el primer curso de adiestramiento para el personal encargado de ese centro de rehabilitación, y también destacó que aunque no se puede hablar con número del tamaño del problema, es necesaria mayor protección para este tipo de enfermos para que no pierdan su empleo.
Para el cetemista Fernando Salgado, esa enfermedad no sólo se da en áreas tradicionales, como la gastronómica, hotelera, en músicos, sino en todos los ámbitos, por lo tanto se tiene que hacer un frente común de información, sensibilización y prevención.