El Banco de México destaca que el debilitamiento de la economía de Estados Unidos ha incrementado los riesgos de que ocurra una recesión en el primer semestre del año.
La economía de México se desaceleró durante el último trimestre de 2007, "inducida por un menor crecimiento del consumo y de las exportaciones petroleras", señala el banco central en su comunicado sobre política monetaria.
"Podría intensificarse con el debilitamiento estadounidense", advierte Banxico.
Ante esta situación anunció que mantendrá sin cambio su Tasa de Interés Interbancaria en 7.50%, mientras que la Junta de Gobierno continuará atenta a la evolución del balance de riesgos en relación a las proyecciones de inflación, con miras al cumplimiento de la meta de 3% en los tiempos previstos.
