Las propuestas emitidas por los precandidatos de los partidos en Estados Unidos son desfavorables para los migrantes mexicanos, advirtió Elaine Levine Leiter, del Centro de Investigaciones Sobre América del Norte (CISAN) de la UNAM.
Sin embargo, indicó en un comunicado, sería mejor que triunfara un postulante demócrata, porque este partido sostiene una posición más conveniente para México y los connacionales.
Expuso que si bien los principales aspirantes, Hillary Clinton y Barack Obama, se vieron obligados a votar a favor de construir el muro fronterizo y adoptar una línea dura, son más realistas en cuanto a la importancia de la mano de obra, y su tradición ideológica les da una posición más abierta hacia ese flujo humano.
No obstante, explicó que será difícil que lo manifiesten de manera abierta por la coyuntura electoral y la exigencia pública.
La especialista consideró que en esta contienda los conservadores han pasado a la ofensiva al insistir en la legalidad y la seguridad; es decir, no se pronuncian directamente en oposición a la migración, pero sí en pro de la estancia legal y contrarios a quienes desacatan las leyes estadounidenses.
Este asunto ha sido enarbolado inclusive por los demócratas y por quienes han apoyado la propuesta de reforma, que buscaba regularizar la situación de los indocumentados, aseveró.
Dijo que los republicanos y su ala más radical han orillado a sus oponentes a tomar una posición tenue en torno de este fenómeno, y a insistir en un discurso para salvaguardar la frontera y las leyes.
Levine subrayó que hasta el momento ninguno de los precandidatos se ha pronunciado por un acuerdo particular o una cuestión bilateral, sino por una política que se aplicaría igual a todas las minorías.
"Nadie habla de un trato especial a México por ser socio comercial o vecino; por más que en nuestro país se hable extensamente de un acuerdo migratorio, como si fuera un pacto entre dos partes o naciones. Este tema no está en la agenda política de ninguno de los contendientes", apuntó.
Asentó que uno de los focos rojos en el actual proceso es la economía, porque uno de los sectores más golpeados es el de la construcción, fundamental para Estados Unidos, y principal empleador de la mano de obra latina.
Esta circunstancia también representa una presión en contra de los migrantes, debido a que se estima que en los próximos meses habrá pocas fuentes laborales en ese rubro, lo que mezcla desfavorablemente las finanzas internas con la migración, dijo.
