Manuel Camacho Solís, colaborador de Andrés Manuel López Obrador, aseveró que la reforma energética "va adelante" y su aprobación ayudará a que no haya crispación política.
Entrevistado en el Senado de la República luego de que se reunió con el líder de la bancada del PRD, Carlos Navarrete, Camacho Solís sostuvo que la decisión ya está tomada y este jueves la Cámara alta discutirá la aprobación de la reforma en la materia.
Señaló que el Frente Amplio Progresista (FAP) apoya esa modificación, "ya que se avanzó mucho", y lo que proponía el Ejecutivo federal se eliminó tras la iniciativa que presentaron el PRD, el PT y Convergencia.
Según él, si el FAP no hubiera planteado su propuesta de reforma en el rubro la iniciativa que presentó el presidente Felipe Calderón ya habría sido aprobada.
Sin embargo, a decir de Camacho Solís, cualquier decisión equivocada puede significar un gran costo al país de manera inmediata, por lo que se debe hacer un esfuerzo para evitar una crisis mayor y no dejar huecos en el futuro.
El ex militante del PRI expusó que no se puede ignorar la negociación que ha habido en el Senado en el tema y "ya estamos muy cerca".
Reconoció que la modificación de los dictámenes se debió al debate de las fracciones legislativas y a la consulta nacional que realizó el FAP, "aunque en estos momentos estamos en otra coyuntura política y se debe proteger a Pemex para que siga adelante".
