La senadora María Teresa Ortuño exigió a los gobernadores de todo el país que no propongan instaurar la pena de muerte, pues se trata de una "cortina de humo" para ocultar su incapacidad en la lucha contra la delincuencia.
En entrevista, dijo que el tema de la pena capital debe ser discutido por especialistas no por los mandatarios estatales, que tienen "la obligación de trabajar con las leyes que hay y meter a la cárcel a los delincuentes".
"No se vale que ante la incapacidad de abatir la criminalidad, diversos gobernadores generen una cortina de humo para abrir un debate sobre la pena de muerte", indicó la presidenta de la Comisión de Educación del Senado.
Por ello, hizo un llamado a los gobernadores a que dejen a otros el tema de cómo castigar a los delincuentes, "ya que de nada sirve implantar la pena de muerte cuando 97 por ciento de los delitos quedan impunes".
Lo que deben hacer los gobernadores de Chihuahua y Coahuila, que han propuesto la pena de muerte, es simplemente aplicar las leyes actuales a los delincuentes, subrayó la legisladora del PAN.
Además, los cuerpos de Seguridad Pública de los tres niveles de gobierno también deben brindar la protección necesaria con las leyes actuales, "que defectuosas, buenas o malas, son adecuadas para meter a prisión a los delincuentes", puntualizó.