Logró cruzar el río Aguanaval, pero al regreso se lo comió el agua. Iba en completo estado de ebriedad.
No le importó pasar
Ayer, a las 9:30 de la mañana, fue encontrado el cuerpo sin vida de Raúl Garza Pargas, quien tenía 45 años y vivía en ejido La Ventana, de Coahuila. El occiso había desaparecido desde el domingo a las 7:30 de la tarde, cuando ingresó al agua. Luego de la búsqueda que iniciaron amigos y familiares, el cuerpo fue encontrado en el ejido Picardías, en Durango, a casi un kilómetro del lugar donde desapareció.
Según los testigos, el occiso se encontraba en un banco de arena, boca abajo. El Ministerio Público Aurelio Urbina dijo que Raúl Garza había fallecido por asfixia por sumersión, luego de intentar cruzar el Aguanaval. El cuerpo fue reconocido por los padres de Raúl.
Ellos dijeron que tenía el vicio del alcohol. Una hora después del hallazgo llegaron al lugar autoridades de Matamoros, Coahuila, debido a que había una confusión por saber quién haría el reconocimiento del cuerpo.