Alí Chumacero se considera un obrero de la palabra. (El Universal)
Alí Chumacero cumplirá 90 años con varias certezas: es un obrero y no un intelectual de la palabra, va a morir libro en mano y su mayor preocupación es ayudar a los jóvenes escritores. Su lucha en la vida ha sido porque las cosas perduren, aunque sabe que éste es deseo de muchos y ganancia de pocos.
“Quiero que cuando me vaya con mi música a otra parte me recuerden como un hombre venido de un pueblecito pequeño llamado Acaponeta, de un estado pequeño llamado Nayarit, que llegó al Distrito Federal y dijo: ‘Señores, yo también soy un humano capaz de dejar sobre la conciencia de los mexicanos un sentimiento, un reflejo de lo que es la vida’”.
En el anuncio de un homenaje que recibirá por su 90 aniversario, que se realizará del nueve al 24 de julio, organizado por la Secretaría de Educación Pública (SEP), el Gobierno del Estado de Nayarit, la Universidad Autónoma de esa entidad y el FCE (donde labora desde hace más de 50 años) el poeta dijo que su vida es “un desorden previamente ordenado”, una forma de ver el mundo como si se fuera a acabar en días. “Felizmente para mí, el mundo ha sido no sólo de 90 años. He vivido tres minutos en cada minuto; he gozado de la vida, ha sido muy celebrada mi forma de ver las cosas, he procurado no pelear con nadie, le he dado por su lado hasta a mis hijos. He sido un hombre que sin buscar el aplauso ha vivido espléndidamente porque es muy bien sabido que yo he sido un hombre tacaño”.
Al autor dijo que ha vivido como un príncipe y goza de la vida porque no le hace falta nada. “He sido un hombre que ha leído muchos libros, dueño de una las mejores y más amplias bibliotecas de este país y además he sido alguien que ha encontrado en la vida un refugio para ahorrarse las horas de sueño. He vivido de noche y he soñado de día”.
Alí comenzó a leer a los 12 años, desde entonces ha formado una biblioteca de más de 40 mil volúmenes que aún no sabe dónde quedará a su muerte; lo que sabe es que estará ligado a los libros hasta el final de sus días.
Para celebrar sus 90 años, el gobierno de Nayarit abrirá con apoyo del FCE una librería donde actualmente se ubica el Polyforum que en una época se llamó “José López Portillo”.
Lo que no han definido es si ese espacio, o el que el Fondo abrirá en la Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, es el que llevará el nombre de Alí Chumacero.