René Bejarano señala que el Movimiento Nacional de la Esperanza y López Obrador comparten los liderazgos de izquierda en ámbitos separados. (Agencia Reforma)
Se desliga del movimiento de López Obrador, pero dos hermanos de su ex jefe lo apoyan.
René Bejarano está de regreso.
Conocido como “el señor de las ligas”, luego de que en 2004 protagonizó los videoescándalos que lo exhibieron recibiendo pacas de dólares de manos del empresario Carlos Ahumada, el ex asambleísta quiere volver a la escena política.
A la cabeza del Movimiento Nacional por la Esperanza, cuya presentación oficial está programada para el 30 de noviembre, Bejarano construye su propia estructura en todo el país.
Asegura contar con el apoyo de Arturo y José Ramiro, dos de los hermanos de su ex jefe en el Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, Bejarano señala que el Movimiento Nacional de la Esperanza y López Obrador comparten los liderazgos de izquierda en ámbitos separados.
“Son movimientos separados que pueden converger, pero son para fines distintos. Los intereses políticos de los adversarios de la izquierda siempre buscan acomodar las cosas como les interesa, pero tenemos claro a dónde vamos y de dónde venimos”, dice en entrevista.
¿Apoyan a su movimiento los hermanos de López Obrador?
Dos, sí, y uno, no. Bueno, no he hablado con uno de ellos, con Pío no he hablado. Con Arturo y con José Ramiro, sí. Tenemos amistad y probablemente coincidan con el movimiento.
¿Está preparado para una polémica por su reaparición?
Quién sabe si haya otra más fuerte que la de aquel entonces (los videoescándalos). Dudo que vuelva a haber otra tan fuerte, y si ya soporté aquella, es difícil que haya otra más fuerte. Tenemos fortaleza y carácter para salir adelante pero, además, no vengo en ánimo de conflicto ni para generar controversias, vengo con ánimos de organizar causas positivas.
¿Hay funcionarios del GDF en su movimiento?
Hay ciudadanos que tienen diversos trabajos, hay gente de diversos partidos; hay personalidades y gente sin partido. El acto del próximo domingo no pretende vincular a ningún funcionario de ningún gobierno, ni municipal ni estatal y federal.
Es a título individual, es un derecho ciudadano, y no debe alarmar a nadie. Si hay personas que tiene trabajo en algún gobierno, lo hacen en domingo, que no es día laborable, ni van a usar recursos públicos o sus puestos para promover el movimiento.
¿Estos se podría traducir en un movimiento electoral?
No. Para eso son los partidos o las asociaciones políticas. Esta es una asociación civil que no pretende convertirse ni en asociación política ni en partido.
Tenemos presencia en más de mil municipios, en las 32 entidades y en algunos estados de la Unión Americana. Lo construimos desde febrero de 2004. Tuvo una interrupción por razones obvias, durante los videoescándalos, pero después de que recuperé mi libertad llevo como cinco vueltas a la República en tres años.
Son las mismas cinco vueltas que ha dado López Obrador al país...
No, él ha hecho mucho más. Yo voy y vuelvo el mismo día y él hace recorridos más minuciosos, cada quien en su ámbito y cada quien con sus tareas.
Pláticas con la APPO
Bejarano descarta que la irrupción del Movimiento Nacional por la Esperanza tenga que ver con la coyuntura electoral de 2009, pues admite que el lanzamiento de un proyecto político quedó en suspenso cuando protagonizó los videoescándalos de 2004.
“Si lo hubiéramos hecho en septiembre, dirían que se viene el Informe, o que estaba el debate de la reforma energética; y si lo hubiéramos dicho en marzo, pues que había otras elecciones internas (del PRD).
“Ni modo, un día tenía que ser. Es esta fecha, pero no tiene fines electorales. No vamos impulsar candidaturas, para eso son otras instancias; no pretendemos ninguna candidatura como movimiento”, asegura.
Admite que su movimiento podría tener confluencia con otras expresiones como con la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), con cuyo líder, Flavio Sosa, está en pláticas.
“Hemos coincidido con líderes de la APPO. He estado apoyando y reuniéndome con el líder que estuvo preso en La Palma (Flavio Sosa). Lo conozco desde antes, y así muchos. Quién sabe (si Sosa vaya a integrarse), vamos a hablar. Es un movimiento que empieza fuerte, que va a crecer mucho más”, expresa.
Acusan a López Obrador de alentar odio en el PRD
A cinco días de entregar a Jesús Ortega la presidencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Guadalupe Acosta acusó a Andrés Manuel López Obrador y a Alejandro Encinas de alentar con sus discursos una actitud de odio hacia quienes no piensan como ellos.
Lo anterior, dijo, aún cuando muchos son luchadores sociales de izquierda de toda la vida.
“Yo no comencé en la lucha en el 88 ni vengo del Partido Revolucionario Institucional (PRI), vengo de la izquierda de toda la vida y ahí me voy a quedar; no creo que algunos que nos señalan con el dedo flamígero tengan la misma autoridad política y moral que tenemos muchos de nosotros”, subrayó.
En entrevista, expresó molestia porque en todos los actos y reuniones del tabasqueño, como el de ayer en la asamblea informativa, sus seguidores repudiaron con gritos a “Los Chuchos”, y no se haga nada por frenar la idea de que quienes no piensan como Andrés Manuel son traidores.
Acosta Naranjo dijo ser compañero de la causa del tabasqueño en muchos temas, “pero no soy su incondicional de ni él ni de nadie, soy un hombre libre”.
Alista Encinas
movimiento para
renovar al perredismo
El ex candidato a la dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Alejandro Encinas, anunció que en enero próximo constituirá formalmente un movimiento que pugnará por la renovación de esa fuerza política.
Descartó asimismo que la corriente Izquierda Unida vaya a desaparecer, pues aseguró que será el eje articular del movimiento referido.
Entrevistado antes de reunirse con los dirigentes de esa corriente para definir los pasos a seguir rumbo al Consejo Nacional perredista, destacó que han tenido muy buena respuesta en todo el país en lo referente al movimiento que conforma.
Informó que esta semana estará en algunos estados del país y se reunirá con dirigentes de las corrientes agrupadas en Izquierda Unida y de otras organizaciones sociales y ciudadanas.