ENOJADOS. Familiares de los viajeros esperaban información de los vuelos.
Como ya se hizo costumbre en La Laguna, hubo otra amenaza de bomba, pero ahora en el aeropuerto de Torreón.
Desorden
Fue poco antes de las 7 de la tarde de ayer cuando en la aereolínea Alma se recibió una llamada anónima diciendo que en uno de sus aviones había una bomba. Decenas de personas, entre familiares y viajeros estaban inconformes ya que las autoridades no decían lo que estaba ocurriendo. Cinco vuelos fueron desviados a ciudades como Monterrey y Durango, procedentes de Tijuana, México, Houston y Los Ángeles. La gente quería saber de sus familiares que llegarían a Torreón. Ámparo González, de 90 años de edad, con lágrimas en los ojos decía que le habían perdido su andador y el medicamento que traía en su equipaje y que nadie le daba información de nada, sólo la sacaron del aeropuerto sin darle nada de información de su equipaje. Por más de dos horas permanecieron cerradas las puertas del aereopuerto hasta que el Ejército confirmó que sólo había sido una falsa alarma, como ha sucedido los últimos 2 meses.
