Guillermo Cañedo señaló que 'la directiva asume plenamente su responsabilidad en esto. Ya tuve pláticas con el dueño del equipo (Emilio Azcárraga Jean), y hay una enorme molestia por ver al equipo en las condiciones en que está'. (jammedia)
Una planeación arriesgada, el poco tiempo de trabajo que ha tenido el técnico Rubén Omar Romano y la falta de reacción de algunos jugadores tienen al América en una crisis de resultados y casi al fondo de la tabla general, reconoció el presidente del club Guillermo Cañedo White.
El directivo, quien tuvo una plática con jugadores en las instalaciones de Coapa dijo sentir "rabia y frustración porque el esfuerzo se ha hecho y el trabajo también y los resultados no se están dando".
"El equipo pasa por una situación que calificamos de preocupante por tres factores y el primero es que se hizo una planeación muy arriesgada del plantel al empezar la temporada".
En este punto, explicó que no se esperaba lesiones de tantos jugadores, lo que provocó la inclusión de varios jóvenes que, aceptó, no están aptos para tener tanta responsabilidad en un cuadro grande como el América.
Como número dos citó "la poca oportunidad que ha tenido (el técnico) Rubén Omar Romano de trabajar con el equipo, ya que desde que llegó. sólo ha tenido partido tras partido sin tiempo de explicar a los jugadores lo que espera de ellos".
El tercer factor, agregó, es "que algunos de los jugadores no han reaccionado con la energía y pasión ni con el pundonor con el que se tiene que portar la camiseta. Bajo estas condiciones, nos tienen en una crisis de resultados, de la que el equipo tiene que salir lo más rápido posible".
En la conferencia de prensa expresó que "es muy lamentable ver la posición de América en la tabla y saber que habían pasado muchos años sin estar en una crisis así, y ahora esperamos que pasen 100 años sin una crisis de esta".
De la plática que tuvo con los jugadores, comentó que "el mensaje de hoy es de unidad porque estamos en el mismo barco y necesitamos todos poner nuestra parte para llegar a buen puerto".
"Hoy no es día de buscar culpables, sino de estar unidos, la solución es el trabajo, dejar trabajar a Rubén, dejar que los jugadores entiendan el nuevo sistema, que los extranjeros y los de peso específico pongan su experiencia y los jóvenes su voluntad para que el equipo muestre una cara diferente el próximo domingo", declaró.
Sobre las probables sanciones a aquellos jugadores que no rindan en la cancha, respondió que "la directiva ya tuvo pláticas en conjunto e individual, es política de la institución que la ropa sucia se lava en casa".
Como presidente del club, Guillermo Cañedo señaló que "la directiva asume plenamente su responsabilidad en esto. Ya tuve pláticas con el dueño del equipo (Emilio Azcárraga Jean), y hay una enorme molestia por ver al equipo en las condiciones en que está".
"La continuidad de la directiva siempre corre riesgos cuando los resultados no se dan", concluyó.
El América sólo sufre un resfriado, asegura Romano
Desde la perspectiva de un médico hacia su paciente, el técnico argentino Rubén Omar Romano diagnosticó la crisis que vive América como un resfriado, mas no como una pulmonía y por lo tanto no está grave.
Aguilas es último del Grupo Dos con dos juegos ganados, un empatado y cinco perdidos, para siete puntos, pero lo que agravó la situación fue la derrota 0-3 ante Tigres. De hecho por los resultados negativos sustituyó Romano en el puesto a su compatriota Daniel Brailovsky.
Desde su analogía, Romano explicó: "soy el doctor, la enfermedad (que tiene el equipo) se la voy a decir a mis jugadores y no la voy a decir a ustedes, (sí a ellos) de qué está enfermo (el equipo) y por supuesto que hay cura".
En el transcurso de la conferencia, señaló que "no está tan grave el equipo" y posteriormente preciso que "está resfriado, lo que pasa es que ustedes quieren ver una pulmonía, pero está resfriado y vamos a tratar que dure lo menos posible".
De hecho, dijo que empezó la cura pero ha tenido poco tiempo de trabajo para hacerlo, pero hoy habló esperanzado de aprovechar esta semana, de que no hay partido intermedio para que ante San Luis se note más la forma de desempeño de las Aguilas.
Por eso adelantó que habrá mayor dinámica, se verá un equipo diferente, aunque aseguró que en los dos últimos encuentros hubo lapsos en que se notó su estilo.
Aunque dijo que no será fácil el encuentro que viene pues será ante San Luis, al que consideró un equipo canchero y peligroso, formado por jugadores que de repente adormecen y de repente despiertan para hacer daño.
Respecto al hecho de tener un plantel disminuido, principalmente por lesionados que lo obligan a echar mano de jóvenes todavía sin la madurez para encarar la exigencia de la institución, afirmó que eso lo supo desde un principio.
"Eso ya lo sabía, por eso no hay excusa y al mismo tiempo es un reto sacar al equipo adelante", afirmó.
Señaló que esa será una labor de grupo, nada individual y por eso fue tan importante la plática que tuvo hoy el presidente del club, Guillermo Cañedo White, en la que resaltó la unión para cerrar filas.
"Nos pidió tranquilidad, paciencia, ser solidarios, que todos debemos estar juntos, él está con el equipo apoya y más que nada todo depende de nosotros para salir adelante", dijo de las palabras de Guillermo Cañedo durante la plática.