La restricción en la colocación de tarjetas de crédito obligará a los bancos mexicanos a ampliar y mejorar la oferta de préstamos en otros segmentos, como sucede en pequeñas y medianas empresas e hipotecas.
Marco Carrera, director de estudios de mercado de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), destacó que ante la mayor prudencia de los intermediarios en el rubro de consumo, muchas instituciones se enfocarán a las pequeñas y medianas empresas (pymes), infraestructura y al ramo agropecuario.
En la actualidad, el financiamiento de la banca comercial a las pequeñas y medianas empresas superó al segmento de consumo y vivienda.
En lo que va del año, los préstamos a este sector reportaron crecimientos de 30%. La Asociación de Bancos de México (ABM) detalló que para el cierre de 2008 se prevé mayor demanda de recursos por parte de las empresas. “El incremento del crédito al sector productivo es un factor que contribuye al crecimiento de la inversión”.
Respecto a los préstamos agropecuarios, éstos aumentaron 11% para totalizar 64.5 millones de pesos.
Este organismo desarrolla desde hace meses un registro con información de micro, pequeñas y medianas empresas que tienen crédito.
Al cerrar 2007, los préstamos a microcomercios aumentaron poco más de 200%; los que se dirigen a las pequeñas empresas avanzaron 41%. Los créditos para establecimientos medianos crecieron 42%.
Marco Carrera reiteró que ante la mayor prudencia para otorgar préstamos al consumo, en especial de tarjeta, los intermediarios buscarán nuevos nichos y se generará mayor competencia en otros segmentos.
