La ropa interior de una mujer británica fue la clave para que su sobrino la usara de emergencia y controlara un incendio en su cocina.
John Marsey y su primo Darren Lines estaban friendo pan en la cocina de Jenny Marsey en Hartlepool, en el noreste de Inglaterra, cuando la comida se incendió y el fuego amenazaba con propagarse.
Lines tomó enseguida lo más cercano de un montón de ropa lista para lavar: los calzoncillos extragrandes y azules de su tía.
Mojó la prenda y la echó sobre las llamas, sofocando el fuego con éxito, explicó un vocero del departamento de bomberos de Cleveland quien pidió el anonimato debido a las políticas del departamento.
Aunque Lines pensó rápido y evitó que la cocina se quemara, la ropa interior de su tía quedó ligeramente chamuscada.
"Pudo ser mucho peor", dijo ella. "Mi familia podría estar en el hospital pero las bragas acudieron al rescate. Simplemente estoy muy agradecida con los muchachos".
El vocero de los bomberos dijo que el principio general de usar una tela grande y húmeda para apagar un incendio es seguro.
En cuanto al uso de ropa interior agregó: "Claramente depende de qué tamaño es, pero no quiero entrar en detalles".
