El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ofreció hoy su respaldo al proceso seguido por la Organización de Estados Americanos (OEA) para tratar de reducir las tensiones causadas por el operativo militar de Colombia el pasado fin de semana en territorio de Ecuador.
La portavoz de la ONU, Marie Okabe, dijo que Ban considera que la resolución adoptada el miércoles por los 34 países de la OEA "ofrece un mecanismo imparcial para clarificar lo acontecido y ofrece a los dos países una vía para resolver sus diferencias pacíficamente en cooperación".
Okabe indicó que "el secretario general extiende su completo respaldo a este proceso" y da la bienvenida al "papel principal" que desempeña la organización panamericana en la resolución del enfrentamiento entre los dos países suramericanos.
La resolución unánime del Consejo Permanente de la OEA establece que el Gobierno colombiano violó la soberanía e integridad territorial ecuatorianas al atacar el sábado a una unidad de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) dentro del país vecino.
En esa incursión contra las FARC, un grupo considerado terrorista en la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, dentro de territorio de Ecuador murió "Raúl Reyes", el "número dos" de esa guerrilla, junto a una veintena de supuestos integrantes de la guerrilla.
La resolución establece, además, la creación de una comisión que encabezará el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, e integrada por cinco embajadores designados por él.
El grupo visitará ambos países para después elevar un informe "a la reunión de consulta de ministros de Relaciones Exteriores y proponga fórmulas de acercamiento entre ambas partes".
Por último, resuelve convocar una reunión de cancilleres para el 17 de marzo en la sede de la OEA en Washington, con el fin de que examinen los hechos y formulen las recomendaciones pertinentes.
La declaración de hoy es la segunda del máximo responsable de Naciones Unidas desde el estallido de la crisis que enfrenta a Colombia con Ecuador y Venezuela, a las que hoy se ha sumado Nicaragua en el rompimiento de relaciones con Bogotá.
Al igual que en esta ocasión, Ban apeló el lunes a la solución de las diferencias entre los dos países mediante el diálogo.
La ONU ha asumido un segundo plano en la mediación de esta crisis, ante la voluntad de sus protagonistas de abordarla por el momento en el marco regional de la OEA.